El volumen de deuda ascendía a 31 de diciembre a 1,427 billones de euros y supone un récord respecto al cierre de años previos, pero no bate el máximo registrado el pasado mes de septiembre, cuando la cifra superó los 1,432 billones.
Las estadísticas provisionales publicadas este jueves por el Banco de España reflejan también una progresiva reducción a lo largo de 2021, ya que en el primer trimestre el peso de la deuda en la economía era del 125,3 %, bajó al 122,8 % en el segundo y se colocó en el 121,8 % en el tercero.
El volumen de deuda en términos totales se incrementó en 81.979 millones de euros durante el pasado ejercicio, un 6,1 % más, aunque su peso en comparación con el PIB es inferior respecto a la cifra de cierre de 2020 debido al crecimiento económico del país.
La mayor parte de esta deuda corresponde a la Administración Central: el Estado acabó el ejercicio con 1,245 billones de euros, lo que representa una subida del 6,8 % respecto a 2020, mientras que el saldo correspondiente a "otras unidades" se contrajo un 7,8 %, hasta los 54.138 millones.
La deuda en manos de las comunidades autónomas creció un 2,9 %, hasta los 312.898 millones de euros, y la de las corporaciones locales repuntó un 0,8 % hasta los 22.122 millones.
A estas cifras se suma la correspondiente a la Seguridad Social, que ascendió a 99.185 millones, un 16,2 % más que a diciembre de 2020.
Las estadísticas de las distintas administraciones no suman el total de la deuda debido a la existencia de 305.619 millones de deuda autonómica y de la Seguridad Social que también contabiliza al Estado como acreedor, según se desprende de la información aportada hoy por el Banco de España.
Por instrumentos, los títulos de deuda a largo plazo concentran el mayor importe con 1,146 billones de euros, frente a los 88.338 millones en títulos a corto plazo y otros 188.209 millones en préstamos.