Las fake news no son algo nuevo. De hecho, lo único que en el paradigma actual de la comunicación entendemos como un nuevo ‘problema’ de las fake news es su gran viralización. Lo que la sociedad está viviendo en estos momentos es tan solo una manifestación acentuada de un aspecto negativo de la información que se viene manifestando en los últimos tiempos.
Es por ello por lo que debemos concienciarnos como sociedad del gran problema al que estamos expuestos y, en consonancia, actuar de una forma responsable. Por ello, debemos abordar la necesidad de la aplicación en términos educativos de la alfabetización mediática. Pero… ¿por qué hablamos de alfabetización mediática para hacer frente a las fake news? Se trata de una herramienta esencial para dotar a la sociedad actual de la habilidad de identificar qué noticias son falsas y cuáles no lo son.
Cabría plantearse ¿por qué ocurre todo esto? Lo cierto es que la sociedad depende hoy más que nunca del periodismo de calidad. Hasta la aparición de las redes sociales, el periodismo representaba una función político social que había sido catalogada como ‘El cuarto poder’. Esta falta de filtraje de la información, que tradicionalmente se ha conocido como gatekeeper, es la que están aplicando los buscadores y las redes sociales.
La sociedad depende hoy más que nunca del periodismo de calidadSin embargo, para la autora Nuria Fernández-García (en su artículo de 2017 ‘Fake News: una oportunidad para la alfabetización mediática’), parece más interesante que el periodismo asuma de nuevo su rol dentro del contexto social: «En un ecosistema mediático en el que se institucionaliza la mentira con sobreinformación y una gran abundancia de fuentes, se hace necesario comprobar la veracidad de las noticias. Y aquí radica una oportunidad para el periodismo».
El rol de los políticos emerge como otro de los aspectos clave en la lucha contra las fake news. El expresidente de los Estados Unidos Donald Trump, por ejemplo, se ha convertido en estos últimos 2 años en todo un fenómeno viral en redes sociales a raíz de sus intervenciones sobre la Covid-19, en muchas ocasiones basadas en afirmaciones falsas sobre la pandemia que han confundido a la sociedad y han contradicho a los científicos conocedores del virus.
Finalmente, desde la academia se está haciendo un esfuerzo considerable para analizar, entender y comprender este fenómeno. El estudio ‘El impacto de las fake news en la investigación en Ciencias Sociales’, de Ignacio Blanco, Carmen García y Santiago Tejedor, observó en 2019 cómo el término ‘fake news’ estaba presente en el 50% de las palabras clave de los 10 artículos más citados de la Web of Science y en el 70% de los artículos más citados de Scopus.
En este escenario parece evidente que se debe abordar el problema de una forma conjunta, empleando la alfabetización mediática como elemento conductor y creador de una sociedad más preparada para hacer frente a los bulos informativos, al mismo tiempo que el debate político se vuelve más serio, la prensa más rigurosa y la academia sigue aportando nuevos descubrimientos.
Javier Bustos Díaz, director de Investigación y profesor de ESIC Barcelona.