El 11 de septiembre, coincidiendo con la Diada, suele ser la fecha de consenso para poner fin a la temporada alta turística en Costa Daurada y Terres de l’Ebre. Un año más, el ciclo se repite, y llega el momento de los balances. Aunque algo está cambiando. ¿Hasta cuándo la industria turística seguirá hablando de ‘temporadas’ en las comarcas del sur de Catalunya? Desestacionalizar este destino turístico ha sido y sigue siendo la gran aspiración del sector. ¿Qué implica y de qué depende?
Primero, el análisis clásico: balance de temporada alta. Berta Cabré, presidenta de la Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme en Tarragona (FEHT), se encarga de ello: «Arrancamos el año 2023 con unas expectativas altísimas, con un ritmo de reservas muy alto, que nos generó una cierta euforia. Pero cuando llegamos a la segunda quincena de mayo, experimentamos un parón muy brusco en el nivel de reservas, y finalmente hemos tenido reservas de última hora que han vuelto a llenar» y que, tras un mes de julio algo más flojo, llevaron a que la ocupación en la Costa Daurada superase el 90% en agosto.
«Somos un destino de 365 días al año, y este es nuestro futuro»
Berta Cabré (Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme en Tarragona)
«Tenemos un cliente muy polarizado -prosigue Berta Cabré-, que o bien reserva muy temprano, o lo hace muy tarde. Y, pese a no alcanzar cifras extraordinarias, hemos tenido buenas ocupaciones». A esto se le añade otra explicación: «En Centroeuropa tuvieron una climatología muy buena en junio y julio, y eso hizo que el cliente internacional esperase un poco para esas reservas, sumado al tema económico de la inflación a nivel europeo».
Tras el balance de temporada, el análisis estratégico. «Somos un destino de 365 días al año, y este es nuestro futuro», asegura Berta Cabré. «Llegar a tener una buena ocupación todo el año -prosigue- nos dará una estabilidad laboral y comercial muy importante, pero hemos de remar todos en la misma dirección, no solo los establecimientos, sino también la restauración y el comercio».
«Y después -añade la presidenta de la FEHT-, no parar de reinvertir y especializarnos, tal y como hicimos durante la pandemia, cuando la destinación no se detuvo, y aprovechamos para continuar con el mismo nivel de inversión y reconversión, lo que ha hecho que el cliente se encuentre ahora con establecimientos que se han modernizado y actualizado».
A todo ello se le une otro factor estratégico, donde el buen tiempo de junio y julio en el centro de Europa este año, junto a los episodios de calor tórrida experimentados en el sur de Europa, serán cada vez más frecuentes. «Debemos invertir en sostenibilidad -destaca Berta Cabré-, teniendo en cuenta que hay unos efectos climáticos donde contar con más meses del año con un clima cálido nos favorecerá como destino para desestacionalizar, pero por contra tendremos un clima demasiado cálido en meses de alta ocupación, y tendremos que saber cómo atraer a esos clientes, ofreciendo servicios adecuados».
Albert Savé, presidente de la Associació Hotelera Costa Daurada i Terres de l’Ebre, coincide: «Uno de los temas que como sector nos preocupa y nos ocupa es la concentración de la estacionalidad en los momentos punta de la temporada. Esa concentración es una consecuencia de la organización de la sociedad, y sería bueno intentar escalonar las vacaciones escolares, incluso las de las empresas, para no concentrarlo todo en las mismas fechas. Ya estamos intentando desplazarlo a otros momentos, pero darle la vuelta a esto es difícil».
«Buscamos alternativas -prosigue Albert Savé-, enfocando al turismo deportivo, cultural, de golf, a convenciones y congresos, estudiantes... ya se van buscando maneras de ir llenando todas las temporadas no altas, pero es un reto mayúsculo, porque el turismo familiar se concentra mucho en determinadas fechas».
Motor económico
Juan Antonio Duro, profesor del Departament d’Economia de la Universitat Rovira i Virgili (URV) y experto en Economía del Turismo, destaca que, «indudablemente, el peso del sector turístico en la provincia de Tarragona es muy importante: mientras que en Catalunya representa alrededor de un 12% del PIB, aquí puede llegar a un 24% o 25% del PIB provincial; en todo caso, por encima del 20%».
«El sector turístico -prosigue Juan Antonio Duro- no es una anécdota, lo cual no excluye que haya otras actividades industriales. ¿Seguirá siendo importante? Previsiblemente, sí. Pero es cierto que el sector se enfrenta a desafíos que deberá encarar en los próximos años».
«Ir llenando todas las temporadas no altas es un reto mayúsculo»
Albert Savé (Associació Hotelera Costa Daurada i Terres de l’Ebre)
En esos desafíos, Juan Antonio Duro coincide en que «hay una presión que tiene que ver con el clima, con algunas estimaciones sobre cómo pueden evolucionar los vectores climáticos, con lo cual debe buscar una temporada bastante menos estacional». Sobre este punto, este economista destaca que Tarragona «es la segunda provincia más estacional de España, solo superada por las Illes Balears. Esa desestacionalización es la válvula de escape para poder mantener la demanda turística, para atraer [visitantes] fuera de las semanas con temperaturas menos agradables».
«El cambio climático -añade Juan Antonio Duro- te dice que aguantar flujos solo puede ser fuera de los meses habituales, lo cual alargará la temporada, y ha hecho que lo que era un objetivo estratégico ahora sea un objetivo natural. Pensar en una tesitura en la que el mes central sea septiembre no es nada aventurado en unos años, ese es el escenario».
Aunque, en su caso, no ve tan cerca la transformación de este territorio en un destino de 365 días. «Lo que veo -reflexiona Juan Antonio Duro- es más bien una situación de racionalización en la gestión de la oferta de 365 días, con una nueva gestión de esos potenciales 365 días».
Análisis fino
Berta Cabré, de la FEHT, despliega esta idea: «Es muy importante que sepamos elegir qué queremos hacer y a quién nos queremos dirigir, analizando muy bien la oferta, porque el cliente del mes de octubre no pide lo mismo que el de julio, y hemos de focalizar el producto hacia él».
«Debemos aprender -prosigue Berta Cabré- a hacer los análisis en pequeños periodos, no en grandes periodos como hasta ahora, analizando con una mirada más cercana, porque en un mismo mes suceden diversas cosas. Es lo que se evidencia cuando analizas los eventos deportivos, por ejemplo. Pero también tenemos el ejemplo de PortAventura».
En el caso de este complejo de ocio -uno de los motores que impulsan el cambio en esta industria turística en la demarcación de Tarragona-, su vocación de alargar la temporada hasta prácticamente cubrir todo el año va de la mano de una cuidada adaptación de su oferta a los distintos momentos y perfiles de clientes.
«La Costa Daurada está llena de recursos para atraer [visitantes] todo el año -razona Juan Antonio Duro, de la URV-, y alinearse con PortAventura es un objetivo, igual que tenemos campings abiertos todo el año, recursos culturales, la proximidad de Barcelona...».
«Pensar en una tesitura en la que el mes central sea septiembre no es nada aventurado»
José Antonio Duro (Universitat Rovira i Virgili)
En muchos casos, grandes activos que impulsan la atracción de importantes volúmenes de visitantes. En otros, modelos de nicho muy especializados que pueden acabar conformando una robusta Long Tail (larga cola), donde la suma de muchos pequeños da un resultado importante.
«Hay cosas más pequeñas -explica Berta Cabré, de la FEHT-, como los eventos gastronómicos o culturales, que sirven para ir buscando esos targets y tener actividad, igual que el ámbito deportivo es ya un excelente aliado, porque no se concentra en la época estival. Pero proyectos de la envergadura de Hard Rock (ver información anexa) son los que necesitamos en nuestra demarcación, con una actividad de shopping que puede desestacionalizar esta temporada, además de que nos posiciona, igual que nos ayuda estar en una zona con PortAventura y Barcelona al lado. Si Hard Rock fuese una realidad, nos ayudaría mucho».
Del mismo parecer es Joan Calvet, presidente de la Associació d’Apartaments Turístics de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre, que defiende el papel de los apartamentos y viviendas de uso turístico en esta desestacionalización. «La estacionalidad es alta -asegura Joan Calvet-, y hasta que no hagamos un esfuerzo de inversión en el territorio con Hard Rock, como se hizo y sigue haciéndose con PortAventura, no lograremos romperla».
«Pero para desestacionalizar -prosigue Joan Calvet-, nuestro sector es importante, porque una vivienda de uso turístico, donde muchas son segundas residencias, a nosotros nos es muy fácil tenerla preparada en cualquier época del año, al contrario de hoteles o campings, que necesitan ocupaciones más altas».
Mireia Sans, presidenta de la Associació de Càmpings de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre, reivindica que el sector del camping ya ha dado ese salto para alargar la temporada, con no pocos establecimientos abiertos todo el año. Ha ido de la mano de un mayor conocimiento en el mercado local catalán, donde «el camping ya es una alternativa que muchas familias valoran en el momento de ir de vacaciones, tanto con niños, con adolescentes o sin niños».
Sobre la desestacionalización de la temporada, «sería algo ideal, aunque hay que tener en cuenta que, como se trata de una temporada muy intensa, necesitamos hacer un parón; pero la tendencia es alargar la temporada aprovechando los buenos climas». Una ventaja que, constata, también tiene su reverso: «A modo de ejemplo, este año hemos repartido en nuestro camping más ventiladores que nunca en nuestra historia. Si esto es una tendencia, tendremos que adaptar las instalaciones a esos cambios, pero seguimos en un entorno de condiciones climáticas muy privilegiadas».
«Sin una inversión en el territorio como Hard Rock no romperemos la estacionalidad»
Joan Calvet (Ass. d’Apartaments Turístics de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre)
Sobre la importancia de contar con grandes activos que impulsen esa desestacionalización, Mireia Sans es clara: «Creemos que cualquier motor que aporte un valor equivalente al que aportó PortAventura es un activo importantísimo. Aportar este volumen de visitantes y de atracción turística es importantísimo a nivel de toda la economía provincial».
«Cualquier inversión en línea con PortAventura -prosigue Mireia Sans-, como puede ser un Hard Rock, ha de ser un impulso para toda la provincia que nos aportará un volumen similar [al que ya aporta PortAventura], y hay que apostar por una infraestructura así en nuestra zona, muy necesaria para ir evolucionando como destinación turística en Europa».
«Cualquiera que aporte un valor equivalente a PortAventura es un activo importantísimo»
Mireia Sans (Associació de Càmpings de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre)
La consecuencia, según explican desde el sector, sería un salto cualitativo importante, que posicionaría a este destino como uno de los referentes en el sur de Europa. «Podemos aspirar a mucho -resume Berta Cabré, de la FEHT-, porque tenemos un destino que puede ofrecer mucho. ¿Qué destino de costa tiene una ciudad como Barcelona al lado, parques naturales, patrimonio cultural o paisajes como el Priorat, todo a menos de una hora? Tenemos todos los ingredientes para triunfar, pero arrastramos el factor de la estacionalidad».
«El talento -concluye Berta Cabré- busca estabilidad. Por eso necesitamos la desestacionalización, para que la gente tenga ganas de formarse y evolucionar profesionalmente en este sector. Estoy convencida de que cuando en un lugar hay actividad y eso se transmite a nivel de sociedad, las ganas de dedicarte a esa actividad aumentan».