Una recogida de lentisco –un arbusto muy apreciado en el centro de Europa como ornamento y cuya recolección está regulada– parece ser la causa del incendio forestal que se produjo el pasado 1 de abril en la Serra de Pàndols, en el término municipal de Gandesa. Así lo han constatado los Mossos d’Esquadra y los agentes rurales.
En la causa abierta en el Juzgado de Gandesa figura un joven de 23 años como investigado. Él se encontraba junto con otras cuatro personas en la zona con un vehículo, donde se halló más de una tonelada de lentisco.
El incendio se inició sobre la una de la tarde en una zona boscosa cercana al Monument a la Pau-Cota 705. El viento de mestral que soplaba hizo avanzar rápidamente las llamas.
Durante la extinción, los equipos tuvieron que hacer frente a varios contratiempos, como la explosión de artefactos de la Guerra Civil española, los focos secundarios y rodamientos de piedras desde la parte alta de la montaña.
Bombers de la Generalitat movilizó 29 dotaciones terrestres y cuatro aéreas –dos helicópteros y dos avionetas–. A las seis y media de la tarde dieron el incendio por estabilizado. Ardieron 2,24 hectáreas de terreno arbolado.
A raíz de este incendio, agentes de la Unitat d’Investigació de los Mossos d’Esquadra de Gandesa junto con los de la Unitat Regional de Medi Ambient (URMA), conjuntamente con los agentes rurales, iniciaron una investigación sobre el origen del siniestro.
Los indicios obtenidos, así como la identificación y estudio de la ubicación de diversas personas que se encontraban en la zona del incendio recogiendo lentisco, han permitido imputar al joven de 23 años y vecino de Mataró como presunto responsable del incendio.
Precisamente, la Guardia Civil sorprendió a cinco personas –entre ellas el imputado– con 1.087 kilos de lentisco en el interior de una furgoneta. El grupo se encontraba dentro de la reserva de la Xarxa Natura 2000, entre Gandesa y Pinell de Brai.
Las personas habían recogido el arbusto en una zona protegida y sin la correspondiente autorización administrativa. Tanto las herramientas utilizadas para la recolección como el lentisco fueron decomisados y depositados en la deixalleria municipal de Gandesa para su destrucción.
