La juez de Amposta (Tarragona) que investiga el accidente de Freginals, en el que en marzo de 2016 murieron trece estudiantes de Erasmus, ha vuelto a archivar el caso, tras concluir que, pese a que el conductor estaba cansado, no se distrajo ni tampoco falló el sistema de frenado.
En un auto, la titular del juzgado de instrucción número 3 de Amposta acuerda el sobreseimiento provisional de la causa, que reabrió por segunda vez en junio del pasado año después de que la Audiencia de Tarragona le ordenó nuevas diligencias para acreditar si el conductor descansó y si falló el sistema de frenado.
En su escrito, la juez considera que se ha acreditado la existencia de "cansancio" por parte del conductor, aunque no se le puede atribuir una conducta de la gravedad que exige el Código Penal para considerarlo autor de un delito de homicidio imprudente, sin perjuicio de las responsabilidades civiles en que hubiese podido incurrir.
En este sentido, la juez destaca que el conductor, S.R.J., que quedó gravemente herido y que ha permanecido hasta ahora imputado por un delito de homicidio imprudente, respetó los tiempos de conducción y de descanso.
Según la juez, en el momento del accidente, ocurrido el 20 de marzo de 2016 sobre las 5:51 horas en la AP-7, a la altura de Freginals, el investigado conducía a la velocidad máxima permitida por ley, en aquel tramo de 100 kilómetros por hora, sin la influencia de bebidas alcohólicas que hubiesen mermado su capacidad para la conducción.
Además, la magistrada resalta en su escrito que el conductor no incurrió en "distracción alguna", ya que no utilizó los teléfonos móviles de los que disponía.
La juez recuerda que los Mossos d'Esquadra ya determinaron que la causa del accidente fue el cansancio del conductor.
Pese a que se ha sancionado a la empresa propietaria del autobús por infringir la normativa sobre prevención de riesgos laborales, la juez precisa que el día del accidente se respetaron los tiempos de conducción y descanso diario que se establecen en la normativa.
En concreto, según el auto de archivo, el conductor respetó el tiempo de conducción ininterrumpida al haber circulado sin hacer descanso durante una hora y 47 minutos, sin que sus compañeros apreciaran signos de cansancio en él antes de iniciar su trayecto, para llevar a un grupo de estudiantes de Erasmus de Valencia, donde había celebrado las fallas, hasta Barcelona.
Es más, según la juez, el conductor descansó en el momento de la cena del resto de compañeros.
Además, la juez sostiene que no se aprecian errores en la electrónica de control de los sistemas de freno.
Por este motivo, una vez practicadas "cuantas diligencias se han considerado esenciales" para investigar el accidente, acuerda el sobreseimiento provisional, de forma que la causa queda archivada por tercera vez a lo largo de todo el procedimiento.