Hubo un tiempo en el que existían serias dudas sobre el carril diestro del Nàstic. Unos apostaban por la profundidad de Tirlea. Otros por la seguridad defensiva de Pol Domingo. Incluso un tercer grupo apostaba por incorporar a otro lateral que fuera fiable en las dos parcelas. Hoy, esas dudas han quedado reducidas a cenizas. El dueño del carril diestro grana tiene nombre y apellidos: Pol Domingo Ciuraneta.
‘Poldo’, Polete o Polinho, como cada uno prefiera, ha dado un paso casi definitivo para asentarse en la titularidad del lateral derecho. De presente y de futuro. A sus 24 años no ha parado de crecer. Cuando muchos le daban por estancado, Pol ha seguido trabajando para demostrar que tiene mucho recorrido por delante.
Su partido ante el RC Deportivo de la Coruña supuso la demostración de que su proyección sigue en ascendente. Una graduación ‘cum laude’. En uno de los mayores escenarios que ha podido tener, fue el mejor del equipo, en términos globales.
Desactivó a uno de los futbolistas más talentosos del cuadro coruñés, Yeremay. Hablan maravillas del extremo izquierdo canario. Hablan. El domingo, en el Nou Estadi, no se le vio. Entre Pol Domingo y la colaboración de Álex Mula, excelente con y sin balón, neutralizaron al jugador del Deportivo. Tanto que Idiákez no tuvo más remedio que sustituirlo y reservarlo para otros escenarios más propicios. Para rivales menos exigentes que el Nàstic.
Si en defensa fue un bastión llamado ‘Poldo’, en ataque brilló como Polinho. Sus incorporaciones como carrilero fueron un quebradero de cabeza para la defensa deportivista. No conseguían pararlo. El tarraconense superaba rivales por potencia, velocidad y también con detalles de calidad. Conducciones que dejaron evidencia de la capacidad ofensiva del de La Pobla de Montornès.
Segunda titularidad seguida
Pol Domingo ha sido titular en el 67% de los partidos del Nàstic. Solamente se ha perdido cinco encuentros. El último ante el Teruel (0-2). Ha visto tres amarillas, por lo que ni siquiera está apercibido de sanción.
Llegó como central, posición en la que había crecido en la cantera grana. Pero en estos cinco años en el primer equipo, y más de 100 partidos, Pol Domingo se ha convertido en un lateral derecho fiable. Tanto que en situaciones de necesidad, como pasó en Sestao, en las que Dani Vidal tenía sancionados a dos de los tres centrales de la plantilla, optó por mantener al de la Pobla en el lateral y escogió a Iker Recio para ocupar el espacio en el eje de la zaga.
Pol Domingo ha dejado atrás las incertidumbres sobre su figura, si es que había alguna. Con una carrera incipiente, sigue ofreciendo datos de que es un jugador en constante crecimiento. Que se viene arriba en partidos importantes. Que va madurando y dejando atrás ciertas inseguridades que le habían paralizado en otras ocasiones. La experiencia le está aportando confianza y seguridad. Lo único que le faltaba para acabar de instalarse en el vestuario del Nou Estadi.
Pol Domingo es un futbolista que apunta a leyenda grana. Comprometido. Convencido de estar en el sitio adecuado. Segundo capitán de la plantilla y con unas ganas locas de hacer historia en el equipo de su vida.