A Pablo Fernández nadie le puede exigir ni una gota más de esfuerzo sobre el terreno de juego. Es un futbolista de esos que juegan con el alma por delante. No se ahorra un esfuerzo. De esos que van a la guerra con un tenedor sin importarle las consecuencias. Por eso siempre desde que llegó a Tarragona la temporada pasada procedente del Cornellà siempre ha copado muchos de los onces titulares que ha presenta Raül Agné en su cartilla. La confianza del técnico de Mequinenza es absoluta. Le considera un «delantero de otra categoría», tal y como verbalizó en la rueda de prensa previa al duelo frente al Alcoyano.
La visita al Collao no resulta una más para el delantero asturiano. No por el rival, al que no le une nada, sino por el escenario en el que va a comparecer. Allí Pablo Fernández ha vivido su momento más feliz como futbolista del Nàstic. Su gol conseguido en la última jornada en Alcoy le dio al conjunto grana la victoria y le permitió meterse en el play off de ascenso a Segunda División. La historia con el triste final para todos los aficionados tarraconense ya es conocida, pero nadie borrará de la memoria del asturiano aquel bonito momento. El Collao fue la Meca para su fútbol.
Hoy Pablo Fernández regresa a Alcoy con la intención de volver a marcar en ese feudo en el que tan feliz fue. Necesita goles para alimentar su confianza. Suma dos en lo que va de curso, aunque marcó un tercero que no subió al marcador ante el Sabadell en el que es el gol fantasma de la temporada en Primera RFEF. Números insuficientes para un delantero que si consigue engordar su nómina goleadora le dará un salto todavía mayor a su fútbol.
A nadie se le escapa que al ariete le faltan goles, pero le sobran condiciones en otros aspectos que también debe dominar un delantero. Suele ser victorioso en los balones aéreos, fija centrales como poco y este año también ha conseguido amenazar la espalda rival gracias a su largas zancadas. Todos estos argumentos le han servido para acumular 13 titularidades en 16 partidos disputados en total. Unos registros que le convierten en uno de los soldados de Raül Agné por excelencia.
Titular en el Collao
Su presencia en el once titular en el Collao no admite discusión porque la rotación en la delantera anda bastante justa de efectivos. Solo él y Guillermo Fernández están disponibles, ya que Lupu regresa a la convocatoria, pero lleva muchas semanas sin competir, por lo que no podrá tener demasiados minutos. El asturiano y el vasco apuntan a ser la doble punta de lanza de un Nàstic que llega a Alcoy con varias bajas inesperadas que harán que el once inicial presente más novedades de las esperadas.
En la defensa habrá una única novedad respecto al último encuentro y es la entrada de Alex Quintanilla en el centro de la zaga en lugar de Josema que cumple partido de sanción por acumulación de amarillas.
En el centro del campo también habrá una novedad obligada, ya que Pedro Del Campo ha caído lesionado y dejará un sitio libre en la sala de máquinas. Con Montes reubicado en el centro de la zaga, Ander Gorostidi apunta a formar pareja con Marc Montalvo en el centro del campo.
En la banda derecha podría volver a la titularidad Andy Escudero, el alicantino jugará ante su equipo y saldrá de inicio salvo sorpresa tras los problemas de pubis de Robert Simón que solo le han permitido completar un entrenamiento junto con el resto de sus compañeros.
Con esas novedades buscará el Nàstic un triunfo en el Collao que le permita cambiar de año en los puestos de play off. Incluso, y en función de lo que suceda en el resto de partidos de la jornada, los granas podrían ser colíderes.Una situación idílica en una temporada de sobresaltos en la que Agné incluso ha llegado a jugarse su puesto en más de una ocasión. Eso sí, no será el último partido del 2022, ya que el próximo jueves, el Nou Estadi será testigo de la eliminatoria de la Copa del Rey que mide a los granas ante el Málaga, colista de Segunda División.