El encendido de la antorcha olímpica se celebró este martes en las ruinas de la antigua Olimpia, en una ceremonia tradicional en la que se invocó al dios Apolo y se entregó la llama al primer portador, que comienza su recorrido hacia París para los juegos de este verano.
Durante la ceremonia, que se celebra en este sitio histórico antes de cada edición de los Juegos Olímpicos de invierno y verano desde 1936, la actriz Meri Miná, en su papel papel de Gran Sacerdotisa de Olimpia, encendió la antorcha olímpica dirigiéndose a Apolo, rodeada de otras sacerdotisas y vírgenes vestales.
La tradicional ceremonia propone una conexión entre los Juegos de la Antigüedad, nacidos en Olimpia en el año 776 a.C., y los Juegos de la Modernidad.