La falta de acierto exterior condenó al CBT ante un Mataró que estuvo más fino en el lanzamiento. Los tarraconenses tuvieron opciones e incluso se marcharon al descanso por delante en el marcador, pero el 4/20 final en triples frente al 13/34 rival demuestra cuál fue el principal desequilibrio por parte de los azules, que nunca le perdieron la cara al partido.
Los de Noé Monroy empezaron incisivos. Con David Fernández al mando, el equipo tiene un extra de energía. Una marcha más. Y eso era condición imprescindible ante un Mataró que empezó muy fino desde el 6,75. De los quince primeros puntos visitantes (9-15), nueve fueron triples y seis fueron lanzamientos de dos, con un 50% de acierto en tiros de campo.
La del triple era una asignatura que le costaba al CBT, que conseguía buenas situaciones, pero no acababa de definir con tanto acierto. No obstante, los cebetistas aprovecharon jugadas dentro para buscarle las cosquillas al Mataró, acercarse en el marcador (13-15) y ponerse por delante gracias a un triplazo de Dani Tugores (16-15) a falta de un minuto para terminar el primer asalto.
El conjunto dirigido por Charly Giralt salió más enchufado en el segundo cuarto y mantuvo su idilio con el lanzamiento exterior, anotando tres triples seguidos, que dejaron a los visitantes con un 6/13 desde el 6,75 (19-26).
De nuevo, igual que en el primer capítulo, el CBT se rebeló y, arropado por el Serrallo, recortó diferencias (25-27). A la vanguardia de la rebelión estuvo el bueno de Ousmane Ndour, que, con cuatro puntos consecutivos, puso a los tarraconenses por delante (29-28).
Se giraron las tornas y el Mataró empezó a fallar, mientras que los azules fueron sintiéndose más cómodos sobre el parqué (31-28) y mantuvieron la ventaja hasta el tiempo de descanso (39-36).
David Fernández empezó la segunda mitad a ritmo de rock and roll desde el triple (42-37), aunque el Mataró no dejó que los cebetistas se marcharan y anestesió las acometidas locales (42-41). El ritmo del partido se aceleró y las posesiones empezaron a acortarse.
En esos contextos, a Ferran Torres no le tiembla el pulso. El ‘14’ del CBT se erigió en protagonista que mantenía a los tarraconenses en la lucha. Las fuerzas se igualaron y los mataronenses iban encontrando más facilidades para anotar (48-52).
Las amenazas de los visitantes se sustentaban en tres nombres propios, Mohamed Malick, Pape Sall y Jordi Juanola. Gracias a su actuación, el Mataró tomó distancia y se fue hasta los diez de diferencia (55-65), pero este CBT no es de los que se rinden, y un triple de David Fernández colocó a los azules a seis (62-68).
Sin embargo, el conjunto visitante se hizo con el timón del partido y llevó a remolque a los tarraconenses, mermados físicamente, durante el último asalto (68-79).
Los de Noé Monroy lo lucharon y tuvieron opciones de reengancharse, pero el conjunto mataronense pudo desactivar los ataques cebetistas y sentenciar el encuentro.
Ficha técnica.
CBT (74). Fernández (10), Boonyasith (9), Chazelas (13), Alaminos y Ndour (21) –quinteto inicial– Mendes (4), Tugores (7), Buscail (2), Torres (8) y Kohan.
Mataró (87). Traver (8), Viñallonga (9), Malick (17), Cánovas (10) y Sall (13) –quinteto inicial– Zúñiga, Martí (6), Juanola (20), Ariño (2), Heras (2), Silvestre y Omaru.
Parciales. 16-17, 23-19, 19-30 y 16-21.
Árbitros. Miquel Remisa y Kunal Melwani.
