Manu García es una de esas voces del vestuario del Nàstic que cuando habla hay que escucharla atentamente. No suelta tópicos porque acude a la sinceridad siempre que es necesario. El portero sevillano compareció en la sala de prensa del Nou Estadi para analizar el último duelo liguero de este 2022 en la visita al Collao. El portero grana tiene claro que hay que ir a por la victoria porque terminar el año en la parte alta de la clasificación supondría un refuerzo mental evidente: «Es una semana importante porque es la última del 2022 y nos podemos ir de vacaciones con un buen puesto en la clasificación. Hay que preparar el partido con consciencia porque nos medimos a un rival muy duro con un campo en el que es complicado de puntuar. Ganar allí nos daría un salto importante en la clasificación».
No obstante no será nada fácil conseguir la victoria frente al Alcoyano, ya que se trata de uno de esos conjuntos que en su casa se hace fuerte. Manu García tiene claro el tipo de partido que espera y que responde de manera fiel a las características de la mayoría de equipos del grupo II: «Hay menos calidad en el grupo que el año pasado, pero más intensidad y disputas. Es un tipo de juego diferente y hay que adaptarse rápido a ese estilo de partido».
Uno de los temas sobre los que el guardameta quiso dar su opinión fue sobre el cambio de idea de juego del Nàstic esta temporada que le ha convertido en un conjunto menos férreo en defensa. El sevillano aceptó la realidad, pero quiso dejar claro que es un aspecto en el que se está trabajando y partidos como el del Barça B sirven de lección positiva: «En cuatro días parecía que todo era muy malo, pero el equipo tiene una forma diferente de jugar al año pasado, ni mejor, ni peor. Este año estamos encajando demasiado y tenemos que corregirlo. Volver a ganar y dejar la portería a cero ante el Barça B nos vino bien para marcar esa debilidad que tenemos».
A principio de temporada, Manu García fue uno de los jugadores que avisó de la igualdad de un grupo que a priori se pintaba más sencillo que el año pasado, pero que se está viendo que no es así. Ayer lo volvió a remarcar con números en la mano: «Llevamos ya casi un tercio de la competición y los números están ahí. El Castellón parecía que iba a subir en enero y lo tenemos a tres puntos. Todo se está igualando y creo que nosotros si somos capaces en dos o tres detalles seremos un rival muy potente».