Todas las esperanzas de salvación están puestas en el mercado de invierno. La situación deportiva, colistas a cuatro puntos de la permanencia, hacen que la ventana de fichajes de enero sea más importante que nunca. Las carencias que ha demostrado la plantilla (lesiones, jugadores fuera de forma y demarcaciones huérfanas) solo pueden tener solución si se acierta en los refuerzos de media temporada. Y en eso está el Nàstic. Arnal Llibert, director deportivo, pero también el propio entrenador Enrique Martín.
El técnico navarro ya admitió que le gustaría poder firmar ya a algún futbolista, aprovechando las lesiones de larga duración de Iván López o de César Arzo. Si no puede ser, sí tiene claro que la plantilla debe ser reforzada en enero. Bastante. Se prevén muchos movimientos de entrada y de salida.
Mientras trata de sacar provecho de los recursos actuales, con todas las dificultades mostradas en los dos últimos partidos, Enrique Martín no pierde ojo a los posibles futuribles. El preparador de Campanas estuvo hace dos semanas en El Alcoraz para mirar de abrir conversas con el club oscense respecto a la posibilidad de llegar a un acuerdo para la cesión o el traspaso de algún futbolista de la plantilla azulgrana. Entre ellos, Akapo, lateral diestro que esta temporada no está teniendo el protagonismo esperado en Primera División.
El futbolista alicantino de 25 años no puede competir con el propietario del flanco derecho, el ex del CF Reus Jorge Miramón y sólo ha empezado a entrar en el once oscense en las últimas semanas por la lesión de Luisinho. Lo ha hecho a banda cambiada, en el lateral zurdo. Una solución que el club aragonés ve como provisional, hasta la apertura del mercado de invierno cuando buscarán un relevo para ese flanco. Sea el ilicitano o Rajko Brezancic, que debutó la pasada jornada, deberán salir en busca de minutos.
Otros refuerzos
De entrada, el Nàstic planifica realizar entre cuatro y cinco incorporaciones en el mercado de invierno. Dos defensores, un centrocampista, un interior y uno o dos delanteros. Exceptuando en la portería, en todas las líneas. Una petición que hizo Enrique Martín para certificar su llegada al banquillo del Nou Estadi. El navarro sabía qué tipo de plantilla tenía y la necesidad de apuntalarla en invierno para optar a poder salvar la categoría.
Algunas opciones que se han presentado a la mesa de la dirección deportiva y a la del técnico es la apuesta por recuperar a futbolistas de la casa. Jugadores que sepan lo que significa el escudo y que aporten ese plus de intensidad tan necesario en situaciones extremas como la actual. Tarraconenses como Miguel Palanca y Fran Vélez.
El extremo está disputando la Superliga india con el FC Goa, líder de la competición. El campeonato finaliza en diciembre, por lo que quedaría libre para poder firmar por cualquier equipo. Palanca ya formó parte del Nàstic en la temporada 2015-16 con un total de 20 partidos disputados entre liga y Copa del Rey.
Por su parte, el central tarraconense Fran Vélez milita actualmente en el Aris Salónica de la primera división griega. Llegó al conjunto heleno el pasado mes de julio, procedente del Wisla Cracovia polaco.
Vélez de 27 años se formó en las categorías inferiores del Nàstic, pasando por la Pobla y siendo futbolista de la primera plantilla grana en la temporada 2012-13. Tras una campaña complicada, el central tarraconense se marchó al Almería, con el que llegó a disputar dos temporadas en Primera división y otras dos en Segunda antes de marcharse al extranjero.
Está claro que el Nàstic buscará reforzarse en invierno para tratar de darle la vuelta a una situación que a día de hoy está muy negra.
