Ha llegado el momento de la verdad. Ese en el que las piernas tiemblan por lo que hay en juego. Ese en el que la gloria está cerca, pero a la vez lejos. Ese en el que los fines de semana son una constante búsqueda y actualización de los resultados de los rivales directos. Ya solo quedan ocho jornadas para el final de la Primera RFEF y el Nàstic está dónde quería estar.
Está en el escenario que cualquier aficionado grana hubiese firmado sin pensar en la pretemporada. A cuatro puntos del ascenso directo y con un colchón de seis puntos sobre el playoff. Una situación privilegiada que le convierte en un claro candidato a regresar al fútbol profesional ya sea por la vía directa o en unas futuras eliminatorias.
Con 24 puntos en juego, cada vez está todo más definido y en las últimas jornadas el escenario final se dibuja todavía con más color y menos grises. Ahora mismo parece que hay tres equipos, que por sensaciones y por números, van a pelear por la primera plaza.
Sí, el Nàstic está entre ellos, porque se lo ha ganado. Victorias como las del Toralín en esta jornada le reafirman como un equipo con casta de campeón, con casta de ascendido.
Celta Fortuna y Ponferradina se han descolgado por la pelea de la primera plaza
Los granas son terceros en la clasificación, por lo que hay dos rivales por encima que ahora mismo son los favoritos al ascenso. Es una realidad que ellos tienen más papeletas porque la tabla manda. No hay dudas de que el Deportivo es el claro candidato.
El equipo gallego está en una racha irreal en la categoría y ya suma 11 partidos sin perder con un balance de nueve victorias y dos empates. Unos números que les ha permitido obrar una remontada brutal que los tiene en lo más alto, pero sin una ventaja suficiente. El Barça Atlètic está a solo un punto y el Nàstic a cuatro, por lo que no se puede despistar ni un solo segundo.
Hay que hablar también del filial azulgrana que tras estar toda la temporada haciendo la goma ha dado el paso definitivo en las últimas semanas. Los de Rafa Márquez están en un nivel pletórico de forma y eso les convierte en un equipo más que firme para el ascenso.
El filial culé también tiene una racha de 11 partidos sin perder en la que ha calcado los números del Deportivo, 9 victorias y 2 empates.
Y luego está el Nàstic que ha sido el equipo más regular a lo largo del curso y que está en la pelea por eso mismo. Su trayecto en las últimas jornadas no es tan impecable, pero su rendimiento fuera de casa está siendo tan brutal, ha cosechado 17 de los últimos 21 puntos como visitante, que le ha permitido aguantar la embestida pese a su bajón como local.
¿Y los demás?
Celta Fortuna y Ponferradina son los otros dos equipos que estaban llamados a pelear por el ascenso, pero que en las últimas semanas han visto mermadas sus opciones. Ambos han caído esta pasada jornada y están ahora mismo a siete y ocho puntos del Deportivo.
Es una ventaja ya muy importante para los puntos que quedan así que ahora mismo su ascenso directo se presenta como un milagro.