Hace dos semanas que cerró el mercado de verano. El Nàstic completó 17 operaciones entre los ocho fichajes y las salidas (contando los que acababan contrato). El máximo responsable de todas ellas es David Comamala (Madrid, 1978), director deportivo grana desde este mismo verano, que ha regresado a Tarragona para guiar al equipo al fútbol profesional desde los despachos.
¿No ha sido el inicio esperado?
Es evidente. Sobre todo a nivel de puntuación.
¿Está preocupado?
No. Estaría preocupado si no viese que vamos hacia la idea de juego y de equipo que todos queremos. Pero desde la pretemporada hasta el último partido hay una evolución muy clara. Hacer una plantilla es relativamente fácil. Ahora hay que construir un equipo con base en una idea y eso tiene un proceso. Dentro de este proceso tengo claro que vamos en el camino correcto.
La afición si empieza a dar muestras de preocupación, buscando culpables.
Es fútbol. Llevo muchos años en esto. Para lo bueno y para lo malo forma parte de este deporte y su entorno. ¿Es normal? Dentro de la sociedad que vivimos, sí. No solo en el Nàstic, sino en cualquier club de la zona mediterránea. Tenemos este temperamento.
¿Hay algún tiempo marcado para comenzar a encender las alarmas si no salen las cosas?
No es cuestión de encender alarmas, sino de ver si hay evolución en el proyecto y si el equipo está implicado en esto. En este sentido, no tengo ninguna duda. ¿El tiempo? Yo lo que quiero es estar en la jornada 38 en primera posición y si no, en play-off. Es el objetivo. Ahora bien, es imposible hacerte una idea del nivel de la categoría y de los equipos hasta que no pasen diez u once jornadas.
¿Cuál es la línea roja para considerar que el proyecto ha tenido éxito o no?
Vengo al Nàstic para llevarlo a la liga profesional. Todos tenemos que poner de nuestra parte. Si al final de temporada todo el mundo ha dado el máximo y no lo consigues, depende del juego, puede que también sea una temporada de éxito. Lo que toca ahora es trabajar juntos para lograr ese objetivo común.
¿Está satisfecho con la confección de la plantilla?
Estoy contento porque entiendo que dentro de la idea que teníamos en consenso el cuerpo técnico, la dirección deportiva y el Consejo de Administración de plantilla hemos logrado, en un porcentaje muy alto, el perfil de jugadores que queríamos. Jugadores contrastados e importantes que son los que nos dan lo que buscábamos. Ahora es el momento de los jugadores. De los nuevos, los que ya estaban, los renovados, etc. les toca competir. Las notas en el mes de marzo. No podemos evaluar si la plantilla es más buena o menos con tres jornadas de competición.
¿Ha hecho todo lo que quería?
Se ha hecho con coherencia deportiva, dentro de la idea y estructura de equipo que queríamos, y con coherencia económica, dentro de la realidad del Nàstic. ¿Todo? Siempre quieres más.
¿Se le ha escapado alguien?
Sí, siempre pasa. Hay jugadores que quieres y el mercado no te deja, aparecen clubes que han sido más rápidos o tienen más poder adquisitivo y se te adelantan. Es inevitable. Dentro del esbozo de plantilla diría que en un 90% hemos traído lo que queríamos.
¿De los ocho fichajes, hay alguno que se sienta más contento por la complejidad de la operación?
Un paréntesis. No son ocho fichajes, cuatro renovaciones, que a veces son más difíciles que fichar, para mí son diez, porque Marc Montalvo y Marc Álvarez estén asentados en la primera plantilla con todos los efectos. Hay que estar orgullosos de que los dos estén rindiendo de titulares y mostrando un nivel alto. Mérito del Nàstic, del fútbol base, la gente que trabaja en el filial y del entrenador que ha sido atrevido y les ha puesto a jugar. Ahora sí, sobre el fichaje más complejo, diría que el de Guillermo. Era difícil pensar a principio del mercado que acabaría en el Nàstic.
Se ha renovado a Pol Domingo y Marc Montalvo, ¿están blindados?
Siempre he creído en la gente joven. Creo que dentro de todo grupo profesional tiene que haber dos o tres jugadores jóvenes. Si pueden ser de la casa mejor, por tema de identidad y energía. Ese equilibrio es bueno. Todos tienen contrato. El mercado dirá si están blindados.
¿Marc Álvarez podría ser el siguiente?
Para mí es 99% jugador del primer equipo. Hay un tema de licencia, que es verdad que sigue con ficha del filial, pero es algo provocado por la dirección deportiva para dejar un espacio libre para un jugador Sub23. También es verdad que su proceso de formación no ha acabado. Si por lo que sea el entrenador no cuenta con él para un partido baje y juegue con el filial. No concebo tener un chico de 21 años sentado en la grada. Pasa con Valverde e Iván de la Peña. Están cerca de dar el paso, pero si se quedan sin jugar con el primer equipo, pues que bajen con la Pobla. Tienen que continuar con su formación.
¿Podemos esperar más canteranos?
La cantera grana, para mí, siempre tiene jugadores. Hace años que se trabaja muy bien. Hay un punto, no sé si ADN Nàstic, de la zona o qué, pero los jugadores son muy competitivos por naturaleza. Eso hace que sea más sencillo de dar el paso a profesional. Hay muchos jugadores tarraconenses en el fútbol profesional. Entre todos, entrenador del primer equipo y del filial, tenemos que ayudar a que estos chicos den el siguiente paso. La realidad también es que hay que lograr los objetivos. Hay que mezclar esto. La idea está y desde la dirección deportiva se apretará para que sigan subiendo, pero dependerá de los jugadores.
¿Es la Pobla el filial que necesita el Nàstic?
El Nàstic necesita un filial para dar continuidad a la formación de la cantera, donde los equipos están en el máximo nivel. Creo, personalmente, que la Pobla es ideal. Por muchos factores. La diferencia podía ser de nomenclatura, llamarse Nàstic B, pero no veo mayor problema. Al contrario. Es una manera de hacer territorio. Tener un club vinculado con mucho sentimiento de Nàstic y con unas instalaciones sensacionales y un Ayuntamiento involucrado en el proyecto. A día de hoy hay buena sintonía tanto con Albert Virgili como con Sergi Parés para que los chicos pueden tener un proceso cómodo desde el Juvenil al primer equipo.
Ahora que habla de Sergi Parés, ¿cómo llevan el intercambio de papeles?
Nos conocemos desde hace tiempo y tenemos una buena relación personal. A nivel profesional somos gente profesional para cumplir con los roles que tenemos. Aquí se trata del Nàstic no de las personas.
¿Quedan dos fichas libres, hay intención de ocuparlas?
Estamos atentos al mercado. Valoramos cosas que puede haber opciones. No es fácil. Ni económica ni deportivamente. Tampoco tenemos una necesidad imperiosa. El rendimiento del día a día marcará si hacemos un movimiento o que surja una opción en el mercado. No hace falta llenar todas las fichas.
Déjeme preguntarle por dos nombres propios: Pochettino y Josema.
Los ocho (diez) fichajes se hacen con un motivo y un rol. Hay diferentes casos. El míster ha querido dar contibnuidad a una línea defensiva que el año pasado tuvo un rendimiento espectacular. Posiblemente, es la línea que menos finos hemos estado y será el míster el que dirá. Josema tiene un perfil diferente a Alex Quintanilla y Marc (Trilles). Con Maurizio (Pochettino) estamos muy contentos. Es un chico joven, sub23, que no había competido a nivel profesional y que cada vez va a más. Seguro que tendrá su momento. Ha chocado con la aparición de Marc Álvarez en las mismas posiciones que juega él. Le ha quitado minutos. La competitividad entre ellos les hará mejores.