El Nàstic no solo logró un empate con sabor a victoria en su visita al Alfonso Murube en las semifinales de la ida de play-off. El 2-2 fue un resultado buenísimo para un conjunto grana que se la jugará ante el Ceuta en casa. Allí, el equipo tarraconense ha demostrado ser una bestia competitiva y por algo es el mejor local del grupo 1 al haber sumado 41 puntos en su casillero.
El Ceuta salió con un sabor amargo de boca por el resultado. Le remontaron dos veces los goles de Rodri y no solo eso, vio como en apenas unos segundos perdía a una de sus piezas más diferenciales para la vuelta.
Corría el minuto 75 de partido cuando Cristian Rodríguez forcejeó con Pablo Fernández, señalando el colegiado falta. Nacho González, muy pillo siempre en este sentido, fue directo a buscar a la estrella del Ceuta. Le buscó las cosquillas y se las encontró. El futbolista de Jérez de la Frontera reaccionó con un manotazo y el colegiado lo interpretó como expulsión. Una roja que dejó al Ceuta con 10 durante el resto del partido y que impedirá a Rodríguez estar en el Nou Estadi Costa Daurada salvo que el equipo cabaya presente un recurso de apelación y este prospere.
El colegiado del duelo, Pérez Hernández señaló lo siguiente en el acta: «Cristian Rodríguez fue expulsado por golpear con el brazo en el estómago de un contrario, con uso de fuerza excesiva, no estando el balón en juego».
Rodríguez es un futbolista que llegó este pasado mercado de invierno procedente del Castellón y que se trata de uno de los jugadores con mejor golpeo de balón de la categoría. Ya lo demostró en la ida, ya que su disparo se estrelló en el palo y precedería al primer gol cabaya. Luego también repartió una asistencia de gol a Uche, pero este estaba en fuera de juego. Un futbolista que ordena, amenaza y asiste con su pie y que el Nàstic evitará controlar de cerca en la vuelta.