52 partidos en LaLiga, cuatro en la Premier League y tan solo 23 años. Son solo algunos números que reflejan lo que ya ha logrado y lo que puede llegar a lograr Aleix Garcia. El ulldeconense disputó la liga belga la temporada pasada cedido, dejando grandes números, y se ha desvinculado del Manchester City para adentrarse en un proyecto tan lejano como cercano, el Dinamo de Bucarest, uno de los equipos más reputados de Rumanía. Pese a encontrarse a más de 2000 kilómetros de casa, Aleix Garcia ha recalado en un club presidido por un español, Pablo Cortacero, con un viejo conocido del fútbol español como entrenador, Cosmin Contra, y con diferentes miembros y piezas del cuerpo técnico españoles. El pasado fin de semana, Aleix Garcia debutó como titular, jugando 74 minutos en la derrota del Dinamo en casa ante el Craiova por 0-1.
¿Cómo han sido los primeros días en Rumanía?
Ajetreados pero ya instalados en el piso. Acabamos de hacer la mudanza y ya estamos un poquito más tranquilos.
¿Cómo has llevado vivir lejos de tu casa, en Inglaterra o Bélgica?
Yo ya estoy acostumbrado a estar fuera de casa, lejos, no es nada nuevo para mí. Además, estoy con mi pareja. También el hecho de viajar me gusta porque veo mundo y visito lugares que si no fuera por el fútbol no conocería y estoy muy contento de estar en Bucarest.
Tuvo una gran temporada pasada, jugando en el Mouscron, en Bélgica.
Sí, la clave fue que fui a un sitio donde tenía posibilidad de jugar cada partido. Estuve bien, y estoy muy contento de cómo fue la temporada, y Bélgica me encantó como país.
¿Cuando acabó la temporada, sentiste que necesitabas un pasito hacia delante?
Yo quería ir a un sitio en el que fuera a jugar, y creo que en el Manchester City no lo iba a conseguir, así que creo que lo mejor era salir, no me arrepiento de nada y estoy muy contento ahora mismo de donde estoy. El fútbol no se acaba en el City.
¿Cómo ha sido la salida del City?
Al final hemos llegado a un acuerdo, y he salido de la mejor manera posible. Estoy agradecido porque he estado seis años con contrato en el City y sé que me ha dado mucho. Siempre estaré agradecido. Ahora se separan nuestros caminos, quién sabe si volverán a juntarse.
¿Existió la posibilidad de volver a España o quedarse en Inglaterra?
Sí, de opciones tuvimos muchas. Quisimos esperar a la mejor, económica y futbolísticamente. Sí salieron cosas en España, pero el club se decantó por otro jugador, así que tampoco podemos hacerle nada. Salió la opción del Dinamo, que prácticamente es un club español y me gustó.
¿Hay muchos españoles?
Sí, casi más que rumanos. Jugadores somos seis o siete, el cuerpo técnico es español, y hay gente que también habla el idioma. La dirección deportiva y el presidente son españoles. Así que estamos como en casa.
Esto también ayuda.
Esperé hasta el último momento, porque estaba pendiente de alguna otra opción, pero desde que supe que la filosofía era española, que el entrenador quería jugar a lo que a mí me gusta, que había algún compañero que conozco del pasado, me gustó la idea. La verdad es que insistieron mucho, y estoy muy contento por la confianza, por la insistiencia, porque al final esto quiere decir que quieren que vayas sí o sí, así que ahora toca estar en Rumanía, y el año que viene no sabemos dónde estaremos.
En las últimas temporadas el Dinamo no ha luchado por ganar la liga.
Sí, es lo que dices. Es un equipo histórico a en el país, que lleva unas temporadas un poco regulares, por eso ha hecho este proyecto, con tanta gente española. Que quieran volver al club donde se merece habla de lo que quieren, es un proyecto muy ambicioso.
¿Se ve mucho tiempo en Rumanía?
He firmado por una temporada. Al final de temporada seré libre, y quién sabe si puedo firmar más temporadas si todo va bien.
¿Con su historial y tan solo 23 años, qué busca con esta aventura?
Al final, tengo 23 años, soy muy joven, me queda mucho camino y mucho por recorrer. Hay jugadores que llegan antes, jugadores que llegan después, pero estoy con la motivación de hacer grandes cosas en el fútbol y lucharemos para que así sea.