Desde la capital del Baix Camp, si miramos en dirección a las Muntanyes de Prades, advertiremos una colina de notable altura anterior a ellas. Recibe el nombre de Puig d’en Cama y es la cota más alta con permiso de las montañas de las que no forma parte.
A simple vista quizá no tenga nada de especial más allá de su forma cónica, pero su falda acoge las ruinas de la masía de Víctor Josep Rosselló Martí, el que fuera alcalde de Reus en la segunda mitad del siglo XIX y cuyo mandato acabó de una forma un tanto estrafalaria: huyendo a Burdeos a bordo de un tren.
La ruta de esta semana nos descubre, por un lado, uno de los mejores miradores del Camp de Tarragona con permiso de alturas mayores y, por otra parte, la fascinante huida de una de las personalidades más polémicas y reformistas de la capital del Baix Camp. Sin ir más lejos, su figura es hoy recordada en una de las plazas más céntricas de la ciudad. ¿De cuál se trata?
Instrucciones de la ruta
Estacionamos al final de la urbanización Picarany, después de Castellmoster, en el Carrer Arbolí. Tomamos la pista de tierra y a escasos minutos proseguimos por el Camí de Mas del Víctor. Desde la masía del exalcalde continuamos por el Camí de les Aixetones hasta una fuente que conecta con el Camí de la Serra.
Encontraremos un cruce de tres caminos en el que tomaremos el de medio. Sólo nos espera una bifurcación más en la que, en esta ocasión, iremos por la izquierda para conquistar la colina. La vuelta la llevaremos a cabo por el Coll del Bosc del Manolo, una altura menor.
La dificultad
El Método SENDIF, creado por la Taula de Camins de l’Alt Pirineu i Aran, sostiene que la dificultad de un itinerario de senderismo depende, por una parte, del esfuerzo físico que este supone y, por otra parte, de los obstáculos del camino.
A nivel de dificultad, este recorrido es de dureza moderada a causa de su desnivel
Desde el punto de vista de la dificultad física este recorrido es de dureza moderada a causa de su desnivel positivo o subida, 320 metros. El principal obstáculo en lo técnico consiste en salvar las pendientes pronunciadas. Por esta razón, es recomendable utilizar bastones de senderismo, al menos durante la subida.
La revolución de 1968
La revolución de 1868, llamada la Gloriosa, fue una sublevación militar liderada por los generales Joan Prim y Francisco Serrano que supuso el exilio de la reina Isabel II, quien entonces estaba de vacaciones en San Sebastián, a fin de instaurar un régimen democrático.
El alzamiento significó el inicio del Sexenio Democrático, recordado, entre otras cosas, por el reinado de Amadeo de Saboya y el asesinato del mismísimo Prim, quien había sido el promotor de un pacto con el que derribar la monarquía isabelina.
El pronunciamiento militar empezó en Cádiz el 18 de septiembre y se extendió por todo el país. La mañana del miércoles 30 de septiembre de 1868, un comité revolucionario llegó a Reus al grito de Vive lo Prim, Visca la Llibertat o Abaix els Borbons, a lo que los vecinos decidieron tomar el ayuntamiento.
No encontraron oposición alguna en tanto que, por un lado, la cabeza militar decidió encerrarse en el cuartel con las tropas y, por otro lado, la mayoría de los regidores habían emprendido la huida.
La revuelta había explotado: la masa lanzó mobiliario, documentación y el retrato de Isabel II por el balcón para después prender fuego al consistorio.
A continuación, asaltaron la casa del alcalde, a quien no encontraron en ella, quemando sus muebles en mitad de la calle y arrancando los árboles que él había mandado plantar. Las acciones se sucedieron en inmuebles de destacados comerciantes y empresarios afines a los gobiernos isabelinos. Fue así como un sinfín de hogueras tomaron los arrabales de Reus. Queda aún una pregunta por responder, ¿qué había sido del alcalde?.
La huida
El martes 1 de enero de 1867, Josep Roselló i Martí, conocido popularmente como «lo Víctor», tomó posesión del ayuntamiento de Reus. Era un industrial enérgico y un convencido isabelino que llevó a cabo reformas urbanísticas, entre las que se cuentan plantar árboles en las calles, atajar la mendicidad o proponer la carretera que une Reus con Castellvell del Camp.
Josep Roselló tomó posesión del Ayuntamiento un 1 de enero de 1867
La mañana del miércoles 30 de septiembre, mientras se sucedían los hechos y los revolucionarios lo buscaban sin éxito, consiguió ponerse a salvo en los cuarteles. Se dice que prosiguió su huida conduciendo una locomotora hasta Lleida. De igual forma que Isabel II, se exilió en Francia y jamás volvió a pisar España a pesar de la restauración borbónica y el reinado de Alfonso XII, hijo de Isabel.
Así pues, Víctor se estableció en Burdeos, donde explotó sus conocimientos de enología dedicándose al negocio del vino. Si bien se desconoce el año exacto de su muerte, se sabe que aún vivía por 1885.
En su recuerdo ha quedado una plaza junto al Carrer Ample. Como bien podía adivinarse, es la céntrica Plaça del Víctor.
Más información
Distancia: 7.92 km
Desnivel positivo: 320 m
Duración: 3 horas
Dificultad física: Moderada