Con el adiós de Harrison Ford a su mítico personaje de Indiana Jones arrancan tres meses de esperados estrenos en la pantalla grande. Los cines están ya ansiosos por recuperar un verano de ‘blockbusters’ en el que las grandes taquillas vuelvan a ser el hecho habitual, y no el anecdótico.
También es la época del año en que niños y adultos tienen un mayor tiempo para, en plenas vacaciones o no, disfrutar de películas para todos los públicos, familiares y con las que compartir un rato bajo el descanso del aire acondicionado.
Pero este no es un verano cualquiera. Debería ser el de la completa vuelta a la normalidad en las salas, con grandes estrenos, algunos de los cuales habían quedado aparcados por culpa de la pandemia.
El mejor ejemplo de ello es precisamente Misión Imposible: sentencia mortal (parte 1), que debía haberse estrenado hace más de un año, pero que Paramount decidió postergarla hasta tener claro que se había superado el Covid-19.
Ahora ha llegado ese momento, con un Tom Cruise que es la estrella absoluta de una saga que lleva recaudados más de 3.570 millones de dólares. Con Christopher McQuarrie a los mandos desde la quinta entrega, Misión Imposible vuelve a subir el listón de la acción en este séptimo acto para el que ha contado con un presupuesto de cerca de 300 millones de dólares.
En esta nueva misión, el agente Ethan Hunt (Cruise) debe rastrear un arma informática que amenaza a la humanidad antes de que caiga en las manos equivocadas.
La próxima semana tendremos también el estreno del último filme de animación de Disney y Pixar. Elemental es una película ambientada en Ciudad Elemento, donde conviven los residentes de Fuego, Agua, Tierra y Aire.
Oppenheimer supone el regreso de Christopher Nolan (Tenet, Dunkerque, Interstellar, Origen o la trilogía de El caballero oscuro). Eso, unido al interés por el personaje en que se inspira (el padre de la bomba atómica), convierte a este thriller en uno de los más esperados del año.
Y si hablamos de nuevas entregas de sagas sobradamente conocidas, cabe destacar dos filmes de terror. Por una parte, la quinta película del universo de Insidious, titulado La puerta roja, y la segunda de La Monja.
En la acción, la tercera parte de The Equilizer, donde Denzel Washington vuelve a encarnar a Robert McCall, un exmarine que acaba recurriendo a sus habilidades para proteger a ciertas personas.
A ellas se suman una nueva entrega de Los mercenarios, con casi todo el equipo de actores de acción encabezado por los incombustibles Sylvester Stallone y Jason Statham, quien repite en la continuación de Megalodón, con el subtítulo de La fosa.
El misterio está representado por una entrega de otra novela de Agatha Christie, Misterio en Venecia, dirigida y protagonizada por Kenneth Branagh como Hercules Poirot. La tarraconense Belén Macías estrena en septiembre Verano en rojo, adaptación de la novela deBerna González Harbour.
También la comedia tiene su espacio. Barbie ha levantado mucha expectación gracias qa que ha sido concebida por Greta Gerwig y encarnada por Margot Robbie y Ryan Gosling, dado que se espera que revierta los tópicos sobre la muñeca más famoso de Mattel para convertirla en icono feminista.
Javier Fesser reúne de nuevo al elenco de Campeones (2018), que abandona el baloncesto para adentrarse ahora en el mundo del atletismo gracias a Campeonex.
Y en ese tono de comedia, pero de acción se mueven Blue Beetle, la nueva apuesta de DC Comics y Warner en el mundo de los superhéroes, y Mansión encantada, en la que Disney ha puesto muchas esperanzas dado que está inspirada en la clásica atracción del parque temático.
Y, para los más futuristas y pesimistas, a finales de septiembre llega The Creator, un thriller post-apocalíptico que involucra un futuro impactado por una guerra entre humanos e IA.