La avería en las bombas de impulsión del emisario submarino que pasa por la avenida Brisamar de Coma-ruga volvió a llenar de agua y suciedad la zona. Esa canalización forma parte de la red que gestiona el Consell Comarcal del Baix Penedès.
La afectación comenzó a última hora de la noche del jueves. Inicialmente se inundó la calle ya que el agua residual brotaba de los registros.
Pero el agua residual también ha llegado a la arena de la playa, aunque no a la zona de baño, por lo que no se ha cerrado a los bañistas.
Los trabajos siguen para retirar el vertido acumulado en uno de los canales y reparar la bomba y canalización afectada.