Vecinos de Cunit han protestado por la implantación de la recogida de basuras con el sistema puerta a puerta que el Ayuntamiento ha impuesto desde hace algo más de un mes.
Con una marcha a pie de más de mil personas que ha recorrido la C-31 y se ha plantado ante el Ayuntamiento, los vecinos piden la retirada de ese modelo de recogida.
Los vecinos critican lo que consideran un sistema deficiente y que va a generar problemas y más suciedad. El Ayuntamiento defiende que es el más efectivo para incrementar el reciclaje de basuras y reducir el coste de la eliminación llevando los residuos al vertedero.
Cada día una fracción
Pero una parte de la ciudadanía rechaza ese modelo por el que deben dejar los cubos en las puertas de sus casas con los residuos que toque cada día. En el caso de que los servicios de recogida observen materiales mezclados, no se llevarán las bolsas.
Presididos por una pancarta con la leyenda Reciclar sí, pero no así. Ni puerta a puerta ni contenedores inteligentes, los manifestantes rechazan los sistemas que el Ayuntamiento ha anunciado que implantará progresivamente en todo el término.
Los vecinos señalan que los horarios para dejar los cubos en las puertas de las casas, entre las nueve y las diez de la noche, no son compatibles con los laborables de algunos trabajos nocturnos.
Advierten también de que generará una acumulación de basuras y suciedad en las calles por vandalismo, vuelco de los cubos e incluso la acción de gatos y jabalíes en busca de comida. En los días de funcionamiento del puerta a puerta ya han denunciado diversos incidentes.
El gobierno local señala que mantiene el sistema. El concejal de Medio Ambiente, José Manuel Cabada explica que las nuevas formas de recogida de basura no están totalmente implementadas y reitera la necesidad de incrementar los niveles de reciclado para evitar el previsto encarecimiento de los costes de eliminación si para el próximo año no se recicla un 70 % de los metales ferrosos y residuos de vidrio, un 65 % de los envases, un 75 % del papel y el cartón, un 50 % de los residuos plásticos y de aluminio y un 25 % de la madera como esxige la Unión Europea (UE).
El coste
Ahora el coste para Cunit de llevar los residuos al vertedero se acerca a los 1,4 millones de euros por las toneladas que se envían. En caso de no cumplir co las exigencias de la UE, el coste se multiplicará.
El gobierno local defiende el puerta a puerta ya que señala que es el sistema que aumenta el reciclaje, medida necesaria para evitar el encarecimiento del sistema de recogida que se trasladaría el recibo.
Pero los vecinos consideran que los bajos niveles de reciclaje hasta ahora son porque los contenedores de las diferentes fracciones (envases y papel) estaban durante días llenos y no se recogían. Y eso desmotiva y enfada, además de que ya sufren un incremento en la tasa de las basuras.
«Si los vecinos ven el contenedor lleno durante muchos días acaban por dejar de reciclar», destacan los organizadores de la movilización.
Tras la protesta de este sábado, presentarán más de 1.700 firmas en contra el sistema y la movilización realizada y advierten que de no tirar atrás el puerta a puerta seguirán las protestas.