La nueva dársena deportiva que se ha construido en el Port de Cambrils, con capacidad para 45 amarres y destinada exclusivamente a embarcaciones de alquiler, se convertirá este verano en un reclamo del turismo náutico de la propia localidad y de la Costa Daurada.
Ubicada en la parte central del Passeig Marítim, frente a la Torre del Port, prácticamente todo está listo ya para su puesta en funcionamiento a la espera únicamente de las edificaciones anexas que darán servicio a la propia dársena y que deben instalarse en la plataforma de acceso.
Su posible volumetría, sin embargo, ha despertado preocupación entre la Associació de Veïns del Barri del Port de Cambrils, que ha tenido acceso a algunos de los diseños que se están manejando y alerta de que podría alterarse la estética actual de la fachada marítima.
La construcción y explotación de la dársena está liderada por BeCharter, la empresa del grupo Hermanos Guasch especializada en el sector de alquiler de embarcaciones. Obtuvo la concesión del concurso público de Ports de la Generalitat con una inversión de 535.000 euros. El espacio se llamará Marina Cambrils.
«Tenemos una de las fachadas más ordenadas del Mediterráneo, y lo que no nos gustaría es que se transforme a partir de ahora», explica el portavoz de la asociación vecinal del Port, Joan Pedrell, quien considera que «en ese espacio se está planteando una construcción que por lo que sabemos ahora mismo parece que va a romper con la estética actual. Una cosa es una simple taquilla y otra una edificación que a nuestro modo de entender es innecesaria en primerísima línea. Hay otros espacios donde podría ubicarse fuera de ahí», añade.
Ports es el titular del espacio donde van a situarse esas edificaciones, en las que deben ubicarse las oficinas, las duchas y baños, el área de reciclaje y el almacén que van a dar servicio a la dársena. Ofrecerá además servicios complementarios como wifi, guardaropa y geolocalización de embarcaciones para garantizar la seguridad.
Con el plan vigente de Ports, el ente portuario podría ocupar la totalidad de la plataforma que hay a nivel del paseo aunque, según ha podido saber el Diari, a instancias del Ayuntamiento se ha corregido ya varias veces el diseño ya que la voluntad es la de consensuarlo al máximo.
Fuentes del propio consistorio han explicado que se están definiendo aún esas edificaciones para que queden integradas al máximo al puerto. Respecto a los primeros diseños se han cambiado paredes opacas por cristal, para ofrecer una mejor visibilidad desde la parte peatonal y las terrazas; se ha creado un pasillo interior y se ha rebajado la altura. Será inferior a la que tiene la caseta provisional que hay ahora. Y el color será blanco en concordancia con las embarcaciones que podrán alquilarse.
Esas mismas fuentes admiten que el primer modelo era muy ostentoso y se ha ido adaptando, aunque al final será imposible minimizarlo más por todos los servicios que debe ofrecer.
La nueva dársena ofrecerá exclusivamente servicios de alquiler de embarcaciones y acogerá a todas aquellas empresas pertenecientes al sector náutico que ofrezcan este tipo de actividades conocidas como chárter: desde embarcaciones de vela (de entre 5 y 15 metros de eslora como máximo), embarcaciones de motor de recreo y pesca, vela ligera, motos de agua, kayaks o paddle surf, por citar algunos ejemplos. Podrán alquilarse embarcaciones sin o con patrón, cerrar servicios de uno o más días y también traslados desde los aeropuertos de Reus y Barcelona.