Bajo el lema ‘hacer deporte de una forma divertida y diferente’, la escuela Art Move Studio de Vila-seca instruye, desde setiembre de 2019, a personas de todas las edades y gustos en un amplio abanico de disciplinas artísticas como el ‘pole dance’ –en todos los niveles, desde ‘amateur’ hasta profesional y élite–, así como acrobacias aéreas y de suelo, dónde se pueden tomar sesiones prácticas para dominar las telas, el trapecio, la cama elástica, el aro e incluso tener nociones de circo.
«Mi primer contacto con la escuela fue como alumna de telas y ‘pole dance’. Después de un tiempo, los antiguos dueños –Christian y Salima– decidieron tomar otro rumbo, emprendieron un viaje hacia Finlandia y me cedieron el timón del negocio. Teníamos una relación muy estrecha y asumir el mando supuso un reto apasionante», expresa la propietaria de Art Move Studio, Carolina Zoyo, quien también ha ejercido de juez en competiciones de ‘pole dance’. Cuenta con un equipo de hasta nueve profesionales que enseñan tanto a principiantes (en cualquiera de las prácticas), hasta todo aquel o aquella interesado en competir. «Mi sueño es que la escuela la acabe llevando mi hija, que
también está enseñando», explica Zoyo.
Y es que, al entrar la emprendedora en el mundo del ‘pole dance’, también hizo otro gran hallazgo: su hija Carolina Arlández mostró un talento natural para dicha disciplina deportiva. Ha obtenido, además, importantes distinciones, tanto a escala nacional como internacional. Zoyo y el equipo de profesores de la escuela han visto crecer el sector y proliferar varias escuelas. «Hemos llegado a montar campeonatos. De hecho, tenemos los campeones del mundo aquí. En esta disciplina nos conocemos todos bastante. Cabe decir que, el universo del ‘pole dance’ se ha hecho grande de forma progresiva», dice la profesora.
Además, califica esta modalidad de deporte, así como la de las acrobacias, como prácticas que entrañan buenos valores, como la disciplina, el esfuerzo y la perseverancia. «A la escuela vienen tanto niños como adultos. Todo el mundo es capaz de practicas deporte alrededor de una barra o dominar telas. Sólo hay que tener ganas. Existe un gran componente emocional en esto, muchas barreras mentales. Al principio, comenzamos con figuras fáciles y, más adelante, las combinamos en coreografías para competidores, según el dominio que se tenga», dice, por su parte, Carolina Arlández.
