La decimoquinta edición del Gran Recapte se llevará a cabo este fin de semana con la intención de recolectar alimentos y otros productos para ayudar a las familias en situación de vulnerabilidad.
En total, más de 120 voluntarios se encargarán de orientar a las personas que quieran colaborar en la campaña en los supermercados, así como del transporte al almacén o el recuento, triaje y clasificación de los alimentos donados.
En esta edición también contarán con la ayuda de alumnos de institutos del municipio, iniciativa que se impulsó el año pasado. 12 alumnos del INS Cambrils y 22 del Ramon Berenguer IV se juntarán con una treintena de voluntarios adultos que se encontrarán en las tiendas y almacén.
Participarán nueve supermercados de manera física, como Spar, Aldi y Esclat, entre muchos otros. Además, otros establecimientos aportarán de manera monetaria y será enviado directamente al Banco de Alimentos.
Cambrils cuenta con una red de distribución de alimentos, gestionada por Caritas Sant Pere, Caritas Santa Maria y Cruz Roja. Estas tres entidades se reparten los productos en lotes iguales y se encargan de proporcionarlos a las familias.
La concejala de Salud e Inclusión Social, Gemma Balanyà, asegura que «Caritas y Cruz Roja permite que los alimentos que se recaudan en Cambrils se queden para las familias del municipio». De esta manera, no se envían al Banco de Alimentos, donde lo repartirían con otras localidades.
Todos los alimentos recolectados llenarán el almacén durante tres meses y servirán para abastecer, aproximadamente, a unas 450 familias cambilenses al mes, más algunas que van entrando.
Una problemática en el orden del día es la inflación, la cual ha provocado que más familias se vean con la necesidad de acudir a bancos de alimentos, debido al aumento de precios que están sufriendo muchos productos.
Afectados por la inflación
Gracias al Gran Recapte, las entidades que reparten comida en el municipio pueden aumentar el stock de los alimentos más afectados por la inflación. El más notorio en los últimos meses es el aceite.
Cáritas y Cruz Roja explican qué productos faltan y los que son más necesarios.
«No es necesario que la gente traiga pasta y arroz, porque son productos que ya tenemos en el almacén», explica Dolors Sabaté, de Cáritas Sant Pere. En cambio, van muy necesitados de leche y aceite.
Pero no solo se dedican a recolectar comida, sino que también necesitan productos de higiene personal y limpieza. Además de comida para bebés.
Hace unos años pusieron varios carteles en los supermercados para que la gente tuviese una idea del perfil de productos necesarios. «Con esta información se ha mejorado la calidad de los productos donados», explica Víctor Mangrané, coordinador de Cruz Roja.
En la edición de 2019 se recaudaron 14.000 unidades y esperan igualar esa cifra prepandemia.