Poco después de las siete de la tarde de este miércoles 2 de septiembre, un ejemplar joven de buitre negro (Aegypius monachus) llegaba a la orilla de la playa de Creixell. Una patrulla de la Policía Local lo localizaba, tras ser empujado por el oleaje hasta la orilla. Se trata de una ave posiblemente d eun año de vida y que se desorientó en su vuelo. Ello motivó que estuviera deshidratada y con falta de alimento tras estar perdida en su salida del nido.
El ejemplar parecía exhausto y ante la necesidad de intentar que se mantuviera en vida se avisó a los Agents Rurals para que se hicieran cargo del buitre. Los expertos recogieron al animal y se lo llevaron hasta el Centre de Fauna Vallcalent, en Lleida, donde tras las primeras 24 horas el ejemplar se recupera de sus debilidades.
El buitre negro no está anillado y se desconoce el sexo, han informado fuentes del Centre de Fauna. Se reducen las posibilidades de que fuera un ave nacida o bien en la reserva de Boumort, en Lleida, o en la de Mallorca. La razón de ello es que no tiene identificación y las dos colonias, la catalana y la mallorquina, están controladas y sus ejemplares anillados.
El buitre negro (Aegypius monachus) es uno de los pocos buitres que se pueden encontrar en Europa junto con el buitre leonado, el alimoche y el quebrantahuesos.
La envergadura media de esta especie es de 250 centímetros, algo más que la del buitre leonado, aunque se han mencionado casos de individuos que podrían haber llegado a los tres metros.
Desde su recogida en Creixell hasta su llegada al centro de fauna, perteneciente a la Generalitat, se le ha dado agua, alimento y se le han hecho análisis para tener la máxima información del ave. En un principio, este ejemplar joven se encuentra bien de salud, si bien se le nota muy exhausto, deshidratado evidenciando que ha pasado días sin comer y sin beber.
En Europa se le puede encontrar en Crimea, Grecia, varias islas mediterráneas (Chipre, Creta, Sicilia, Córcega, Cerdeña y Mallorca) y el suroeste de la península ibérica.
El plumaje es preferentemente negro, salpicado de marrón oscuro en el dorso. El cuello y parte de la cabeza son negros y desprovistos de plumas, aunque en la cara y coronilla se puede encontrar un poco de plumón negro. El pico destaca por su color gris claro, aunque la punta también es negra. En la base del cuello crecen unas plumas pardas oscuras a modo de gorguera y debajo de ellas otra fila de plumas de color claro que cubren la parte superior del pecho.