Vivimos tiempos de cambios. La revolución tecnológica de nuestros días avanza a un ritmo cada vez más acelerado y lo digital se cuela en cada aspecto de nuestras vidas. Para el sector turístico, en un mundo global e hiperconectado como el nuestro, la digitalización se ha convertido en un reto, casi una obligación, que interpela tanto a administraciones públicas como a sector empresarial. Un reto que debe servir para mantener la competitividad, pero también para mejorar la experiencia turística en el destino y para avanzar hacia la sostenibilidad.
«La industria turística de la Costa Daurada ha ido evolucionando para ofrecer una experiencia turística del siglo XXI», aseguraba Berta Cabré, presidenta de la Federación Empresarial de Hostelería y Turismo de Tarragona (FEHT), en la mesa redonda dedicada al tema en la segunda jornada del Salou Congress celebrada hoy martes.
La presidenta de los hosteleros alentó al conjunto del empresariado a avanzar hacia la digitalización de sus negocios. «Para que esta transformación se note en el destino, tiene que ser global –señaló–. Tenemos que sumarnos todos para impregnar de la transformación digital a las empresas y que la industria evolucione al mismo ritmo».
En este sentido, el presidente del Instituto Tecnológico Hotelero (ITH), Javier García Cuenca, destacó la importancia de que todos los agentes turísticos, desde la pequeña empresa a todas las administraciones, cambien la mentalidad para «ver la transformación digital no como un enemigo o una amenaza, sino como un aliado para poder ser más competitivos, más ágiles y dar una experiencia al cliente mucho más valiosa».
Berta Cabré habló también de la importancia de que los sectores privado y público vayan de la mano para avanzar hacia la digitalización de los destinos y reclamó que los fondos Next Generation «también tienen que ser una oportunidad para la transformación digital de las empresas». Hoy por hoy, apuntó, estos fondos europeos se están centrando en la labor de las administraciones, pero no se están materializando en apoyar iniciativas privadas del sector turístico.
Sobre las oportunidades que la tecnología brinda a la experiencia del turista, Cabré dijo que «el cliente cada vez es más exigente, más selectivo y tiene más capacidades. El futuro pasa por saber enfocar claramente qué pide y ofrecerle lo que necesita». Sobre esto, explicó que «la tecnología forma parte de nuestro día a día y lo que vas a vivir en tus vacaciones va a ser una experiencia vacacional que tiene que ir acompañada de lo que ya estás acostumbrado a diario. Es por eso que tenemos que ir siempre un paso más adelante de lo que espera el cliente porque necesitamos sorprender».
«Estamos ante la confluencia tecnológica más importante que ha existido en toda la historia», remarcó el presidente del ITH, «van a salir oportunidades apasionantes y hay que enfocarse en seguir siendo capaces de hacer felices a los demás». En este sentido, recalcó que la estrategia hacia la digitalización no debe olvidar el entorno: «Antes nos enfocábamos en el cliente, pero ahora eso no es suficiente. El cliente también es tu equipo humano, la sociedad y el impacto que tiene tu actividad en el conjunto del planeta».
La jornada de ayer contó también con la participación de Elena González Miguel, directora adjunta de Ciudades Inteligentes de Red.es, que compartió algunas de las experiencias llevadas a cabo por este organismo público en municipios de toda España. «La tecnología tiene tremenda capacidad de introducir mejoras para la ciudad y para el turismo, incrementando la eficiencia en la prestación de servicios públicos y ofreciendo la capacidad de prestar servicios de más calidad y avanzando hacia la sostenibilidad», expresó.