El grupo ecologista necesita voluntarios para cubrir los turnos de vigilancia hasta finales del mes de septiembre, en un esfuerzo por proteger los nidos de tortuga de la playa de La Pineda y asegurar la eclosión exitosa de los huevos.
Fue a mediados del pasado mes de julio cuando una tortuga boba, de nombre Mascletà, desovó en las playas de La Pineda, por primera vez, cerca de 150 huevos. De estos, se decidió rescatar 51 para asegurar su eclosión en incubadora y se dejaron los otros 90 en el nido de la playa. La zona se delimitó con unas vallas y una tela para evitar que algún animal pudiera excavar y romper el ciclo de incubación natural.
Posteriormente, un par de semanas más tarde, a finales de julio, Mascletà emergería de nuevo de las aguas para desovar otra vez en la playa. En este caso fueron 77 huevos que se recolocaron cuidadosamente al lado del primer nido para protegerlos mejor.
Desde entonces, voluntarios han estado vigilando constantemente los nidos para evitar cualquier problema que pudiese afectar al ciclo de incubación de las tortugas. Ahora, con el fin de las vacaciones del mes de agosto, se necesitan nuevos voluntarios para hacer las guardias. El Gepec pone a disposición de los interesados una página web donde se pueden apuntar a los turnos de guardia que deseen realizar.