El Ayuntamiento de Roda de Berà ha detectado 90 viviendas vacías de grandes propietarios en el municipio que podrían ser expropiadas por la Generalitat, ya que hace dos años que están desocupadas. Esta es la reacción del consistorio al anuncio hecho por el Govern de la Generalitat el pasado 9 de mayo, cuando el ejecutivo aseguró que se iniciaban los trámites para expropiar 189 viviendas de 14 municipios catalanes para destinarlas a alquiler social amparándose en la Llei 1/2022.
Desde el Ayuntamiento, el alcalde en funciones, Pere Virgili, valora positivamente el planteamiento del Govern y espera que, con esta medida, se pueda «regular» y poner «freno» al precio del alquiler en el municipio. En este sentido, Virgili explicó que, de los 90 pisos detectados y susceptibles de ser expropiados, hay 13 ya confirmados que corresponden al bloque de la plaza Martorell y que pertenecen a un fondo buitre. Según el alcalde, «el fondo ha tomado nota de cómo tiene que dejar los pisos para que se cumplan las condiciones de habitabilidad y es probable que los deje listos para cumplir con ellas», pero reconoce que «a nosotros nos gustaría que se reconvirtieran en vivienda social, porque esto ayudaría a estabilizar el precio del alquiler permanente».
El bloque de la plaza Martorell había sido ocupado, y en noviembre del 2022, la Policía Local de Roda de Berà actuó para desalojarlo. Según resalta Pere Virgili, este bloque «nos producía graves problemas de convivencia y de seguridad» porque, indica, desde estos pisos, los inquilinos organizaban «actos delictivos». Hoy por hoy, está cerrado y precintado para evitar otra ocupación.
Pero ésta no ha sido la única intromisión de vivienda que ha sufrido Roda de Berà. El municipio del Tarragonès ha sufrido varias ocupaciones en pisos y chalés durante los últimos años. De hecho, los vecinos se han organizado y han colgado carteles por las urbanizaciones advirtiendo que están en contacto con la policía y que acudirán a ella en caso de que sea necesario. Además, el Ayuntamiento ha instalado cámaras de videovigilancia en algunos puntos más conflictivos como, precisamente, la plaza Martorell.
Inspecciones pendientes
Para actualizar y ponerse al día de los procedimientos a seguir en caso de ocupación de vivienda, la semana pasada el Ayuntamiento mantuvo una reunión con el Departament d’Habitatge de la Generalitat. Igualmente, en febrero de 2022 el consistorio aprobó el Pla d’inspecció dels habitatges buits. Virgili explicó que, por convenio, «tenemos compromiso de hacer 30 inspecciones de inmuebles desocupados desde hace años». «Antes de que termine el año todavía tenemos pendientes hacer 17», sentenció.