«Sí zona verde, no edificios». «No más pisos». «Ayuntamiento incívico». Son algunos de los mensajes que pueden leerse en algunos de balcones orientados hacia las antiguas vía del tren de Salou. En concreto en el edificio situado entre las calles Guillem de Claramunt y Valencia, donde los vecinos dejan clara su oposición a parte del anteproyecto del bautizado como Eix Cívic.
Este futuro eje vertebrador de la ciudad contempla el espacio que ahora mismo ocupan las antiguas vías del tren a su paso por el centro, desde el límite del término municipal con Cambrils (camping Sangulí) hasta la autovía de Reus, con casi 2 kilómetros de longitud y 64.976 metros cuadrados de superficie, que el Ayuntamiento quiere transformar en una trama urbana más sostenible, inclusiva y peatonalizada en 2027. El desmantelamiento de las vías se iniciará este año.
En concreto la Associació de Veïns i Comerciants Barenys-Platja de Ponent de Salou, que incluye también a los del barrio de La Salut, rechaza por completo los 16 bloques de pisos proyectados en este Eix Cívic y por tanto sus 300 viviendas, 207 libres y 99 protegidas.
Los actuales residentes entienden que los edificios, entre los que destacará uno de ocho plantas que dotará de centralidad a todo el conjunto, chocan con la avenida únicamente verde que esperaban y siempre les habían prometido desde el Ayuntamienton de Salou cuando empezó a hablarse del desmantelamiento.
Alegaciones registradas
Sus alegaciones al anteproyecto, que registraron este mismo lunes en el consistorio, están encabezadas por un primer punto en el que dejan claro que «no queremos edificios nuevos en el ámbito del Eix Cívic». Es el principal caballo de batalla de su reivindicación.
Como segunda petición consideran que es «imprescindible la construcción del aparcamiento subterráneo en el ámbito, a fin de compensar la desaparición futura de aparcamientos en el Barrio. Este aparcamiento debe tener unas condiciones favorables para los vecinos del barrio, con un abono a un precio módico mensual». En ese sentido también solicitan que se concreten aparcamientos disuasorios en la periferia del municipio «por el mismo motivo».
Entre sus alegaciones también figuran «que se garantice la comunicación vial de la circulación «vertical» de vehículos a través de las calles Pere Martell, Gandesa, Guillem de Claramunt, Barenys y E, como mínimo. Y que la calle Barenys y la calle que suba por donde ahora está el camino de la Mata (tocando al camping), vayan directos al Vial del Cavet, para garantizar la fluidez de subida y bajada desde el Vial. Y también garantizar la comunicación «horizontal» desde la Avenida Diputació de Cambrils hacia el Barrio y a la inversa.
Los vecinos de la Associació de Veïns i Comerciants Barenys-Platja de Ponent de Salou también exponen en el escrito presentado en el consistorio su disconformidad por cómo se ha llevado a cabo el anteproyecto del Eix Cívic «en cuanto a la transparencia y participación, y el hecho de que haya un período tan corto desde que se inició el proceso participativo para presentar alegaciones». «Es una muestra más de la poca voluntad de que haya participación», aseguran.
Incluso van más allá al afirmar que «estas alegaciones son el resultado de haber escuchado a los vecinos y de haber recopilado la gran cantidad de quejas que hemos recibido, y por tanto son reflejo del parecer mayoritario de los vecinos».
El Ayuntamiento responde
El concejal de Territori de Salou, Marc Montagut, ha contestado a través del Diari de Tarragona a todas las alegaciones presentadas por la Associació de Veïns i Comerciants Barenys-Platja de Ponent.
«Analizaremos y estudiaremos cada una de las alegaciones, porque precisamente por eso está abierto ese periodo de alegaciones», señala el edil respecto a la revindicación principal de los vecinos de eliminar todos los edificios ahora mismo previstos.
Montagut también indica que el parking subterráneo que solicitan «está contemplado», que las conexiones viales no solo están garantizadas sino que «se mejorarán respecto a las actuales» y sentencia, sobre la exposición pública del proyecto, que «se ha ampliado el periodo de 30 a 45 días para que la ciudadanía precisamente pueda estudiar el anteproyecto y presentar las alegaciones pertinentes».