9.35 horas de las mañana. El convoy 15231 de la R-17 sale desde la vía 6 de la estación de Tarragona en dirección Salou-PortAventura. En los tres vagones viajan dos personas, junto al interventor y al maquinista. Minutos más tarde, a las 10.07 minutos llega un segundo tren, que hace el recorrido en sentido inverso. En este caso, tan solo va una única usuaria. «Antes vivía en Salou y he llegado a la estación y me han dicho que allí ya no paraban los trenes, así que he tenido que coger el autobús. Suerte que me ha ayudado el conductor, porque no tenía idea», asegura Tania. El tren llegaba unos minutos antes de lo previsto. El desplazamiento solo dura siete minutos, lo que garantizaba a esta usuaria un margen de diez minutos para esperar el segundo convoy, que la llevaría a la capital catalana. «Antes lo cogía mucho. Ahora tan solo cuando vengo a visitar los amigos, pero creo que es muy estresante, porque tengo que comprar un nuevo billete, ¿no?», se preguntaba.
Hoy hace un mes de la entrada en funcionamiento del nuevo trazado del Corredor del Mediterrani, un periodo en el que los usuarios del tren del Camp de Tarragona y Terres de l’Ebre han podido «adaptarse» a la nueva infraestructura. Uno de los cambios que supuso fue la entrada en servicio de la nueva R-17, que de momento tan solo enlaza las estaciones de Salou-PortAventura y Tarragona.
Según datos del operador Renfe, entre 70 y 80 personas utilizan a diario la nueva línea, lo que supone que los 34 convoyes que realizan esta conexión –17 en cada sentido de la marcha– tienen una ocupación media de dos a tres usuarios. Los trenes de primera hora de la mañana son los que registran más afluencia. Pese a ello, el pasado viernes se registró el récord de un solo viajero durante toda la mañana. Una situación que es muy frecuente en los trenes que salen a última hora de la tarde, cuando se dan muchos casos en los que los convoyes viajan de vacío. Así lo asegura el personal de la estación de Tarragona, quien confía que a partir de finales de marzo, cuando abra PortAventura, la afluencia será superior.
Renfe no se plantea hacer cambios en el servicio. «Nosotros somos el operador, en todo caso debe ser el Departament de Territori, que es el titular del servicio y quien planifica el servicio de Regionales y Cercanías», asegura su portavoz, Antonio Carmona.
A partir del próximo día 27 de marzo, cuando abra el parque de atracciones, entrará en servicio el único tren que enlazará de forma directa Salou con Barcelona. Saldrá de la capital de la Costa Daurada a las 9.57 horas de la mañana, parará en Tarragona a las 10 horas y 10 minutos y su llegada a Sants está prevista sobre las 11.33 horas del mediodía. Esto permitirá cubrir el hueco que hay ahora de 90 minutos en el que no circula ningún tren desde Tarragona a Barcelona.
La situación ha generado malestar entre los salouenses que antes utilizaban el tren para ir a estudiar o a trabajar en la capital catalana. En un primer momento muchos de los usuarios mostraron su indignación por la pérdida de servicio. Ahora estos se han buscado alternativas y la beneficiada es Vila-seca. El incremento de frecuencias ha supuesto un aumento en un 25% de los usuarios, lo que supone un promedio de unos mil viajeros al día.
La poca demanda de la R-17 confirma lo que las plataformas a favor del transporte público hace tiempo que venían poniendo de manifiesto. «Es un servicio poco atractivo que no tiene ningún sentido», asegura el portavoz de la Associació per a la Promoció del Transport Públic en el Camp de Tarragona (PTP), Daniel Pi.
La semana pasada los alcaldes de los municipios del Pacte d’Infraestructures del Camp de Tarragona se reunieron con el secretario de Infraestructures i Mobilitat, Isidre Gavín, para valorar el impacto del nuevo trazado. Tras la reunión, mostraron su malestar por la nueva situación y acordaron crear un grupo de trabajo con el operador y los ayuntamientos para abordar «caso a caso» las necesidades de cada municipio.
«De nuevo, como territorio no estamos haciendo lo que debería hacerse. Estamos diciendo que hay un malo, que es muy malo, mientras se sigue dando un papel central a los alcaldes, cuando estos no tienen competencias en materia ferroviaria, para que hagan un sumatorio de reivindicaciones», decía Pi.
Carlos Montejano, portavoz de la Pdf.Camp, afirma por su parte, que «no sé si engañaron a los alcaldes o se dejaron engañar, pero, lo que está claro, es que la apuesta por el tren-tram tiene un recorrido mínimo de cinco años, mientras vemos que están incrementando las presiones para que no se haga».
El alcalde de Salou no ha querido hablar con el Diari sobre al respecto. En las inmediaciones del apeadero de PortAventura han empezado los trabajos para la nueva estación provisional, que está previsto que esté operativa en abril, cuando reabrirá el parque. Pese a ello, tanto Pi como Montejano coinciden en que esta inversión «no tiene sentido». «Para cubrir una demanda de tres pasajeros por tren, no hacen falta grandes estaciones. Sería mejor que se apostara por Bellissens, que al menos sabemos que habrá una demanda», argumentan.
El operador Renfe, por su parte, pone en valor que la entrada en servicio de la nueva infraestructura ha funcionado con una «relativa normalidad» y que ha supuesto una fiabilidad en el servicio que quedó demostrada durante el Glòria, cuando no se registró ninguna incidencia.