Las obras de la comisaría de los Mossos d’Esquadra en Torredembarra encaran la recta final. Con más del 50% ejecutados, los trabajos transcurren sobre el plazo previsto con lo que, según fuentes del Departament d’Interior de la Generalitat, el nuevo equipamiento entraría en funcionamiento en abril o mayo del 2024.
De hecho la pintura fachada del edificio ya permite que éste se distinga como una futura comisaría del cuerpo de seguridad catalán, cosa que a principios de verano todavía no era así. Esta imagen puede verse perfectamente desde la nacional 340 gracias a la ubicación de la construcción, situada entre la calle dels Vernet, la N-340 y la calle dels Bonafilla.
Centrándonos específicamente en las cuestiones de avance de las obras, desde Interior informan que toda la estructura tanto vertical como horizontal del edificio ya está terminada, además de los cierres verticales de madera que las conforman, tal y como puede observarse en la imagen adjunta a este artículo.
Por otra parte, se han impermeabilizado todas las cubiertas y ejecutado todo el pavimento de terrazo. Además, la solera de la zona de detenidos de la planta sótano ya está hormigonada y se han finalizado las obras de las divisorias de la zona de detenidos. En cuanto a los trabajos que se están llevando actualmente, según apuntan desde Interior de la Generalitat, se están haciendo las fachadas ventiladas y ya se ha levantado la estructura del badalot –pequeña construcción que remata y cobija la salida a la cubierta a través de una escalera– en la azotea del edificio. También se están llevando a cabo diversas instalaciones de saneamiento.
Finalmente, recordar que la nueva comisaría de los Mossos d’Esquadra se está construyendo sobre un solar de 1.905 m2 y tendrá una superficie total de 1.488.
En obras desde septiembre
Dentro de poco más de una semana hará un año que se puso la primera piedra para que este equipamiento fuera una realidad. Con un presupuesto de licitación de 4 millones de euros, el plazo de las obras se estipuló en 18 meses con lo que, si en abril o mayo del 2024 se prevén que finalicen, los plazos habrán transcurrido sobre lo previsto.
Por último, recordar que el arranque de la construcción del nuevo edificio se retrasó un año porque los adjudicatarios renunciaron a uno de los lotes ofertados –el de la estructura de madera–, y eso generó varios atrasos.
Finalmente el departamento de Infraestructuras de la Generalitat optó por volver a a redactar el proyecto actualizado y se acabó adjudicando la construcción a la empresa CRC Obras y Servicios, SL.