El pleno del Ayuntamiento de Vandellòs y l’Hospitalet de l’Infant aprobó de manera provisional la modificación de la ordenanza fiscal reguladora de la tasa de recogida de desechos.
Esta modificación supone un incremento del 20% en la parte fija de la tasa doméstica y el establecimiento de una cuota variable ligada a las aportaciones de los usuarios a los sistema de recogida de residuos: penaliza significativamente el no uso del sistema y, progresivamente, a medida que el usuario aporta más recogidas al sistema, esta penalización disminuye, hasta desaparecer por aquellos ciudadanos más implicados en el cambio del sistema.
En el caso de la tasa comercial, se apuesta para mantener los actuales epígrafes en función de la actividad y dimensiones del comercio y para incrementar la parte fija entre el 25% y el 70%, teniendo en cuenta la tipología del establecimiento.
La parte variable se concreta en cuatro tramos, estableciendo un aumento porcentual de la tasa fija, del 25% al 0% en función de la participación de los establecimientos en el sistema de recogida.
Desde el consistorio aseguran que se han visto obligados a subir la tasa de recogida de desechos para cumplir con la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular.
Quien contamina, paga
Según se establece en esta ley, «las entidades locales tienen que establecer, en el plazo de tres años a contar de la entrada en vigor de esta Ley, una tasa que permita implantar sistemas de pago por generación y que refleje el coste real, directo o indirecto, de las operaciones de recogida, transporte y tratamiento de los residuos, incluidos la vigilancia de estas operaciones y el mantenimiento y la vigilancia posterior al cierre de los vertederos, las campañas de concienciación y comunicación, así como los ingresos derivados de la aplicación de la responsabilidad ampliada del productor, de la venta de materiales y de energía».
De hecho, esta ley se basa en el principio de «quien contamina, paga» y establece los objetivos porcentuales que tienen que lograrse para la mejora de la recogida selectiva de los residuos.
En concreto, establece que para el 2025 se tiene que aumentar la preparación para la reutilización y el reciclaje de residuos municipales hasta un mínimo del 55%”. Siguiendo este mismo criterio, se establece el objetivo del 60% para el 2030 y, finalmente, del 65% para el 2035.
Para definir la nueva propuesta fiscal, el equipo de gobierno ha tenido en cuenta no solo los aspectos legales que obligan a modificar la ordenanza sino también el estudio técnico y económico para el diseño de ordenanzas fiscales de pago por participación en el municipio de Vandellòs y L’Hospitalet de l’Infant, encargado por el Consejo Comarcal del Baix Camp y Secomsa, y elaborado por la consultoría ambiental Spora.
En 2023 el déficit final de la tasa de recogida de la basura fue de -307.492,72 €, lo cual supone un desequilibrio del -25,62%. Esta cifra se tendría que cubrir con la nueva tasa de residuos fijada en la ordenanza fiscal.
Para disminuir esta desviación entre los ingresos y los gastos de la gestión de residuos municipales, el estudio propone incrementos en la parte fija de la tasa de basura y el establecimiento de la parte variable, tanto para la tasa doméstica como por la comercial.
al 70% en función de la tipología de la empresa