Europa está más cerca de lo que nos puede parecer. “Hay la misma distancia de Tarragona a Bruselas que de Bruselas a Tarragona”, explica el eurodiputado de Ciudadanos Jordi Cañas. En el Parlamento Europeo se discuten y aprueban la mayoría de normativas que afectan a nuestra vida diaria. Lo que pasa es que no nos enteramos. “Buena parte del trabajo que hacemos aquí no sale en los medios de comunicación, y entonces es como si no se hiciera”, lamenta Clara de Melo, jefa de prensa del grupo Renew Europe, que engloba a las formaciones liberales.
El trasiego de gente por las entrañas de la institución política con más peso de Europa es constante. Visitantes de todo el continente recorren sus pasillos laberínticos para conocer mejor la historia de los 27 países que forman parte de la Unión Europea. España entró en 1986. Uno de los tramos empieza con audioguías y fotografías y acaba en una tienda de souvenirs con mapas, bandera, tazas y todo tipo de merchandising para hacer patria... europea. El 9 de mayo es el Día de Europa. Poca gente lo sabe y menos gente aún lo celebra. “Debería ser fiesta en todos los países de la UE, igual que el 4 de julio en Estados Unidos”, propone un miembro de la delegación tarraconense de Cs que la semana pasada acudió al Parlamento Europeo.
Representantes de la formación naranja de Reus, Salou, Vila-seca, Cambrils, La Canonja y Vandellòs i l’Hospitalet de l’Infant tuvieron la oportunidad de expresar allí sus inquietudes. Primero escucharon las explicaciones de Jordi Cañas y de su colega Eva Poptcheva. Y después cogieron el micrófono en una de las salas del Consejo de las Regiones y dieron voz a sus municipios ante la atenta mirada de dos funcionarios, una finladesa y un español (de Badajoz), que tomaron nota de sus reivindicaciones. “Europa sois vosotros y que estéis hoy aquí y nos deis el punto de vista de los ayuntamientos nos sirve de gran ayuda”, explicaron los dos empleados del ente europeo.
Cómo tramitar los fondos Next Generation, qué hacer con las aguas residuales, la movilidad sostenible o una mejor gestión del servicio de taxis fueron algunos de los temas que pusieron sobre la mesa. La sensación es que el mensaje de estos concejales y candidatos para las próximas elecciones municipales no cayó en saco roto. Los funcionarios, plurilingües y con una gran formación, se empeñaron en transmitir que todas las demandas son escuchadas en Bruselas, otra cosa es que después se puedan arreglar. La potestad, en gran medida, la tienen los Estados. Como en el caso de los Next Generation: España no está haciendo las cosas bien... pero es lo que hay. “Nosotros estamos obligados a contestar todos los mails que recibimos en un plazo máximo de quince días”, aseguró el funcionario de Badajoz, José, que toca principalmente cuestiones relacionadas con el medioambiente. Sus correos electrónicos son públicos, se puede acceder a ellos con facilidad. Burocracia amable.
Por unas horas, Reus, Salou, Vila-seca, Cambrils, La Canonja y Vandellòs i l’Hospitalet de l’Infant fueron objeto de debate en Bruselas.
