Agentes de la Unitat d’Investigació de los Mossos d’Esquadra de la comisaría de El Vendrell detuvieron entre el jueves y el viernes de la semana pasada en varios municipios del Baix Penedès y el Tarragonès a cuatro hombres, de entre 22 y 48 años, como presuntos autores de varios ilícitos, concretamente un delito contra el orden público, pelea tumultuaria, tenencia de armas prohibidas, lesiones, robo con violencia y daños.
Los detenidos son el resultado de una investigación iniciada a raíz de unos hechos que tuvieron lugar la madrugada del pasado 12 de junio del año pasado en una discoteca del barrio marítimo de Coma-ruga, en El Vendrell.
El personal de seguridad echó del local a un joven alegando que se encontraba bajo los efectos de bebidas alcohólicas y, posteriormente y según éste último, le agredieron. Fue entonces cuando se inició una batalla campal entre dos partes, por un lado el personal de seguridad y por otro los amigos del joven expulsado, con lanzamiento de sillas y otros objetos contundentes y con el uso de armas prohibidas por parte de algunos de los implicados.
Como resultado de los disturbios, parte de los implicados en los hechos y otros clientes sufrieron lesiones de distinta consideración y las instalaciones de la discoteca fueron objeto de graves daños.
En el momento del enfrentamiento, uno de los detenidos aprovechó el batiburrillo para agredir a otros clientes e incluso robar violentamente a un cliente que nada tenía que ver con los hechos.
Los investigadores llegaron a la conclusión de que tanto los asaltantes para intentar acceder al interior como el personal de seguridad para controlar la situación hicieron uso de armas prohibidas. La mayoría de personas de ambos grupos cuentan con antecedentes policiales.
Las redes sociales se hicieron un rápido eco de ese episodio violento que generó una alarma social en la comarca.
Los mossos mantienen abierta la investigación para detener al resto de implicados en esta pelea, mientras que los cuatro primeros detenidos pasaron a disposición del juzgado en funciones de guardia de El Vendrell el pasado sábado y quedaron en libertad.
