El proyecto de recuperación del Gorg de Creixell ya está redactado y aprobado por el Departament d’Acció Climàtica de la Generalitat de Catalunya pese a que ni el Ayuntamiento ni los propietarios del terreno tuvieron conocimiento de su exposición pública hasta que acabó el periodo de alegaciones. La notificación les llegó el pasado mes de febrero, cuando la aprobación del conseller data el 2 de octubre de 2023.
La alcaldesa, Montserrat Muñoz, declara que tuvieron noticia de la aprobación del proyecto por un vecino, que en febrero recibió un documento de expropiación forzosa de la propiedad que tiene dentro del terreno. En el documento se exponen las actuaciones que se llevarán a cabo en la zona del Gorg, como son expropiaciones de terrenos y que el aparcamiento deje de serlo. El Ayuntamiento, que también tiene propiedades en la zona, presentó el pasado 23 de abril un recurso contencioso-administrativo al Tribunal Superior de Justicia de Catalunya contra el proyecto, dentro del plazo habilitado por el Departament d’Acció Climàtica.
Dentro del terreno, que forma parte de un Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN) desde el año 2006, hay una zona que desde siempre se ha utilizado como aparcamiento en la playa y que se verá afectada en la renaturalización, acción que el Ayuntamiento quiere negociar para llegar a un consenso.
Muñoz afirma que «la renaturalización de la zona del Gorg nos parece bien, pero queremos que el proyecto se haga con datos actuales y que se valore la zona de aparcamiento», y pide a la Generalitat «hacer el proyecto en común y llegar a un acuerdo que no perjudique ni al pueblo, ni a los comercios, ni a los propietarios».
En el terreno hay un chiringuito y un camping, que dispone de un restaurante público, por lo que la desaparición del aparcamiento afectaría a estos negocios, de manera que se vería perjudicada la afluencia de clientes.
En la zona del Gorg es donde la playa presenta una superficie más amplia, más accesible para todo el mundo y donde más turistas van. «Si los veraneantes no tienen donde aparcar, no pueden acceder a la playa y deciden irse a otro municipio. El pueblo vive del turismo, no podemos perjudicarles», explica la alcaldesa. Además, la ausencia del aparcamiento haría que la gente se dirigiese a la playa de la zona norte, en dirección a Roda de Berà, la cual está muy afectada por los daños del temporal.
El término municipal de Creixell dispone de 1.8 kilómetros de playa, el terreno del Gorg corresponde a casi 1 kilómetro, por lo que el proyecto afectaría a casi la mitad del terreno de playa.
Desde el consistorio piden más tiempo, dado que no se les envió notificación de la exposición pública, una concesión para hacer el espacio del aparcamiento oficial y, en definitiva, «que se sienten (la Generalitat) con nosotros para llegar a un acuerdo mutuo que no perjudique a nadie».