A medida que entra el verano, cada vez son más los vendedores de top manta que extienden sus productos en el paseo marítimo de Calafell para desesperación de los comerciantes que ven la impunidad con la que esa venta sigue creciendo. Es una situación que se repite desde hace años.
También hace unos años hubo una especie de acuerdo tácito para que ese tipo de venta por lo menos no estuviese frente a las tiendas, por lo que se trasladó al otro lado de la riera.
Pero hace semanas que el top manta ocupa cada vez más extensión en el centro del paseo marítimo frente a comercios y locales de restauración, dificultando, además, la movilidad de la gran cantidad de personas que pasean.
Los comerciantes denuncian esa competencia «en más de un kilómetro de venta ambulante que desprestigia el turismo familiar que se quiere vender y destroza el pequeño comercio que lucha por mantener alquileres, puestos de trabajo, proximidad, calidad de sus productos, atención personalizada, locales bonitos...», lamenta Luis del Fresno, propietario de comercios de deportes y vicepresidente de la asociación de comerciantes Fórum de Calafell.
A mediados del pasado año, los comerciantes de Calafell mantuvieron una reunión con el equipo de gobierno, Policía Local y Mossos d’Esqudra para pedir un mayor control de esa venta. Advirtieron que, de no poner freno, la situación podría incrementarse, como algunos empresarios consideran que ya ha sucedido.
Problema enquistado
Del Fresno apunta que es «un problema enquistado que ya nadie quiere solucionar». «Pronto venderán helados, comida para llevar, copas, te sacarán una muela o incluso harán envíos más baratos que el correo...».
En su día, Josep Soria, presidente de Fòrum Calafell, entidad que agrupa a gran parte del comercio de Calafell, señaló que los manteros están en una zona muy localizada, por lo que con una presión debería ser fácil evitar esa venta de top manta.
Para ello se necesitan más efectivos de Policía Local, ahora muy escasos, y de Mossos, también insuficientes para las necesidades de la comarca. No solo de temas administrativos sino de seguridad ciudadana.
Quejas
La creciente presencia de vendedores en top manta ha motivado nuevas quejas de los comerciantes. Pero consideran que es «más fácil mirar hacia otro lugar y un año más seguimos reuniendo asociaciones, policía, cargos políticos, empresarios y simplemente para hablar y no actuar en más de 10 años sufridos».
Los comerciantes sienten que el esfuerzo por mantener sus negocios abiertos, contratación de personal o mejora de sus establecimientos «no sirve de nada».