La remodelación de la Rambla Jaume I de Cambrils será una realidad este 2021. El ayuntamiento ha aprobado inicialmente esta semana el proyecto de reforma de la avenida, que tendrá un presupuesto de ejecución de 3.974.091,58 euros y que transformará este tramo en una vía de plataforma única con espacios verdes, mobiliario urbano y prioridad para peatones.
El ámbito de actuación de la obra será desde la plaza de la Constitució hasta la calle Drassanes y las calles transversales Juan Sebastián Elcano, Roger de Flor, Sant Pere y Roger de Llúria. El proyecto contempla que inicialmente la vía tenga dos carriles con dos sentidos de circulación, aceras anchas, parterres ajardinados y plazas de aparcamiento en línea en diferentes zonas, incluyendo plazas de carga y descarga. De esta manera, una de las afectaciones de la remodelación será la pérdida de varias de las plazas de estacionamiento actuales. Posteriormente, de manera progresiva, cuando haya alternativas de movilidad, está previsto que se convierta en un espacio exclusivo para peatones y micromovilidad.
El concejal de Urbanisme i Obra Pública, Enric Daza, ha confirmado al Diari que el objetivo es iniciar el proyecto en el último trimestre de este año. «Somos conscientes de que será una obra que causará molestias pero intentaremos que estas sean lo menores posibles. El gobierno tenía que afrontar esta obra, es uno de los grandes proyectos del mandato», señala el edil.
El consistorio ya incorporó en los presupuestos de este año una partida de 1.359.265 euros que se destinarán para la ejecución de la primera fase de las obras. Además, hace un par de semanas se organizó una reunión en el centro Les Basses para presentar el proyecto a los vecinos y entidades implicadas. En este encuentro estuvieron presentes representantes de la asociación de vecinos del Eixample Port y de las entidades Xarxa del Port, Unió de Botiguers y la Federació d’Empresaris de Cambrils (FECAM). «Les explicamos el proyecto y hemos incorporado un par de detalles que nos pidieron. La gente está animada con esta transformación», afirma Daza.
Objetivo: incentivar el comercio
Tanto el concejal como la alcaldesa del municipio, Camí Mendoza, manifiestan que este proyecto busca el objetivo de revitalizar la rambla como un polo comercial. Cabe destacar que la avenida cuenta con varios negocios con muchos años de historia, pero también es cierto que en la última década han bajado la persiana algunos establecimientos que ya no han vuelto a retomar su actividad. Daza asegura que la implantación de un urbanismo comercial permitirá la recuperación de espacios para las personas y facilitará la reapertura de estos locales que llevan años cerrados.
El propósito es que en diferentes fases la circulación se reduzca y deje paso a un espacio para viandantes en la Rambla Jaume I, con la instalación de pilones al final de los tramos de las diferentes calles para regularizar la carga y descarga a horas convenidas y evitar el paso de vehículos en horas determinadas. Una decisión que favorecerá la experiencia de compra tanto de cambrilenses como turistas y residentes de poblaciones vecinas.
Esta vianalización será posible con la integración de la antigua vía en la trama urbana, que convertirá esta barrera arquitectónica en un paso permeable. La nueva apertura de la ciudad dará soluciones de circulación que permitirán definir una nueva movilidad interna y reservar espacios para peatones.
Las obras de remodelación también mejorarán el sistema actual de drenaje, que en condiciones de fuertes lluvias no tiene bastante capacidad para evacuar el agua y eso hace que se creen pequeñas inundaciones.
Mendoza añade que la transformación de una de las vías más transitadas del municipio es clave para construir una ciudad más verde y sostenible. También destaca la necesidad de convertirse en una vía de conexión estratégica entre el Eixample Platja y la zona turística del puerto.