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La Badia dels Alfacs es uno de los lugares más singulares del Parc Natural del Delta de l’Ebre, una zona tranquila que destaca por sus valores ambientales, históricos, culturales y también gastronómicos. Navegar en barca, practicar vela, admirar las aves que anidan a su alrededor o degustar su marisco, son algunas de las actividades que puedes llevar a cabo en esta bahía.
La Badia dels Alfacs, que forma la fachada marítima de Sant Carles de la Ràpita, es la bahía natural más grande de Europa. Se une con la costa de forma natural, quedando situada detrás de la Punta de la Banya. La bahía forma una extensa playa salvaje, la Platja del Trabucador, y siete playas urbanas, de entre las cuales dos de ellas, la del Garbí y la de las Delícies, disfrutan de la distinción de bandera azul que otorga la Union Europea por la cualidad de sus aguas. Precisamente un aspecto que destaca en esta zona son las playas de arena fina de la Punta de la Banya, con poca profundidad, ideales para acercarse con los niños.
La Punta de la Banya es una pequeña península formada en el extremo meridional del Delta de l’Ebre. Se extiende delante de la costa de Sant Carles de la Ràpita y está unida al Delta de l’Ebre a través del istmo del Trabucador. Todo este conjunto delimita el espacio marítimo que se conoce como Badia dels Alfacs.
Variedad faunística
Gran parte de su importancia recae en la gran variedad de fauna que podemos encontrar, con especies como los flamencos y la gaviota corsa, entre otros. Acoge una gran cantidad de aves acuáticas y marinas durante el invierno. De hecho, el espacio de la Punta de la Banya ha sido declarado reserva Natural Parcial, y su acceso está restringido. Durante los pasos de migración y durante el invierno se observan grandes conjuntos de pájaros como el flamenco, el pato serrucho, el chorlito gris, el archibebe común o el corremolinos chico. Aunque podemos encontrar muchas otras especies, en especial aquellas que nidifican o hibernan en la Punta de la Banya, como la gaviota audouin, el charrán patinegro, el ostrero euroasiático o el tarro blanco.
En la Punta de la Banya también se agrupan las anátidas, aves migratorias que suelen vivir en las proximidades del agua, como el ánade real, el pato cuchara, el pato colorado o el ánade friso. Y si hablamos de peces, destaca la presencia del fartet, una especie con una población consolidada en esta zona.
Mejilloneras
Una parte muy importante de este espacio son las mejilloneras. Para relajarte y disfrutar de la Badia dels Alfacs en todos los sentidos, una buena opción es visitar las mejilloneras y, en especial, degustar sus fantásticos productos. Para llegar hasta allí se sala desde el puerto de La Ràpita, mientras disfrutas del paseo por la bahía, observando su costa, las salinas de la Trinitat y la reserva natural de la Punta de la Banya.
Después de este itinerario, llegamos al lugar donde se cultivan los mejillones y las ostras del Delta de l’Ebre. Un lugar inédito, especial, donde el agua dulce del río Ebre y el agua salada de la Mediterrànea se fusionan de tal manera que te ofrecen estos sabores únicos. A través de esta visita te introduces en el mundo del mejillón y en la importancia que tiene este producto en la Badia dels Alfacs.
Platja del Trabucador
Si visitamos la Platja del Trabucador, seguro que desde lejos ya observamos una gran masa de velas de colores dibujadas en el cielo. Este lugar es sin duda, uno de los mejores para practicar el Kitesurf, y son muchos los que se acercan diariamente para divertirse con la vela. Sus aguas calmadas, sin oleajes ni corrientes, y la poca profundidad de la orilla, son su mejor atractivo.
La Platja del Trabucador es uno de los espacios más frágiles del Delta y un espléndido ejemplo de playa salvaje, un auténtico refugio de tranquilidad para el visitante.