Las heridas que sufrió Mateo, el pequeño de 11 años asesinado el pasado domingo cuando jugaba al fútbol en Mocejón (Toledo), son compatibles con el cuchillo hallado días después en las proximidades de la casa del padre del joven detenido como presunto autor de los hechos.
Por ello, según han indicado fuentes próximas a la investigación, el cuchillo se ha mandado al Instituto de Medicina Legal para que haga las comparaciones pertinentes, ya que es «muy compatible» con las heridas a la espera de confirmación de las pruebas.
Mientras, las muestras del hisopado del cuchillo se han enviado al laboratorio del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil (Secrim) para analizar.
Aunque en la ropa del presunto autor no se apreciaba sangre a simple vista, el perro de la Guardia Civil también la marcó, por lo que se han enviado muestras a este mismo laboratorio del instituto armado. Se trata de las prendas que llevaba puestas el detenido en las imágenes que de él que se difundieron en el momento de su arresto.
El Juzgado de Instrucción número 3 de Toledo decretó ayer prisión provisional comunicada y sin fianza para el presunto autor de la muerte de Mateo, a la vez que solicitó a Instituciones Penitenciarias el traslado del investigado «a un centro, unidad o departamento adecuado a la situación de discapacidad del mismo».
El joven se encuentra ingresado en el centro penitenciario de Ocaña 1.