El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha acordado poner en libertad al empresario Víctor de Aldama, presunto comisionista del caso Koldo que este jueves ha declarado ante otro magistrado que pagó comisiones en efectivo a altos cargos como el exministro José Luis Ábalos o el número 3 del PSOE, Santos Cerdán.
Horas después de comparecer en el caso Koldo, el juez Pedraz ha atendido la petición del empresario, apoyada por la Fiscalía, y ha acordado como medidas cautelares que comparezca semanalmente ante el juzgado, la fijación de un domicilio para estar localizado y la prohibición de que salga del país sin autorización judicial.
La razón por la que Pedraz ha adoptado esta decisión, según explica en su auto, es que, según el artículo 505.4 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, el juez debe acordar la libertad de una persona si ninguna de las partes solicita la prisión, y la causa que él investiga está secreta y no concurren acusaciones, más allá de la Fiscalía, que ha apoyado la petición de De Aldama.
Víctor de Aldama está investigado en la Audiencia Nacional en dos causas y juzgados diferentes: un supuesto fraude de hidrocarburos que le ha mantenido hasta este jueves en prisión provisional y que investiga el juez Pedraz, y el conocido como caso Koldo, que gira en torno a presuntas comisiones en contratos públicos de mascarillas.
Es en este último caso, investigado por el juez Ismael Moreno, donde ha declarado y se ha comprometido a colaborar en todos los procedimientos que tiene abiertos.
El «expreso reconocimiento» de los hechos en esa comparecencia y la «confesión de los delitos», algunos nuevos, es lo que ha llevado exclusivamente al fiscal a apoyar la petición de libertad en la otra causa que le mantenía preso, según informa Anticorrupción.
La Fiscalía considera que su confesión desvirtúa el riesgo de destrucción de pruebas y atenúa el de fuga, que fueron determinantes para encarcelarle por esta segunda causa.
Al acabar su comparecencia en el caso Koldo, en la que, además de hablar de comisiones, ha implicado al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en la visita frustrada a España de la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, en 2020, la defensa de este empresario ha pedido al juez Pedraz su libertad, que se hará efectiva esta misma noche, según informan las fuentes.
En su declaración, a la que ha tenido acceso EFE, Víctor de Aldama ha relatado gestiones a favor del Gobierno con países como México y Venezuela desde 2019, y ha explicado que intermedió en contratos públicos de mascarillas en pandemia a favor de la empresa Soluciones de Gestión, que consiguió adjudicaciones de más de 50 millones de euros.
Por esa labor ha dicho que cobró y facturó comisiones, pero también ha mencionado que hizo diferentes pagos en efectivo procedentes de la República Dominicana al entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, de unos 400.000 euros; y su asesor, Koldo García, de unos 250.000 euros, a quien llegó a decir: «Yo no soy el Banco de España y ya os estáis pasando».
Porque, según su versión, Ábalos, a quien ha dicho que se refiere como «Gran» en un documento Excel sobre las comisiones, le llegó a pedir 2 millones de euros; y Koldo García -a quien anotó como «Goblins»-, 500.000 euros.
Era este último quien llamaba a las distintas administraciones para gestionar las adjudicaciones y «todo el mundo sabía que llamada que hiciera Koldo estaba respaldada por Ábalos», que está investigado en el Supremo.
Víctor de Aldama también ha hablado de un pago en efectivo de 15.000 euros al secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, que este ha catalogado de «absolutamente falso».
No han sido los únicos altos cargos que han salido en su declaración: con la ministra de Transición Energética, Teresa Ribera, ha dicho que coincidió junto con el directivo de Globalia Javier Hidalgo en varias reuniones para abordar un proyecto para la España vaciada y que en una de ellas, a la que él no acudió, estuvo la mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, en nombre de la empresa Wakalua.
Con la exministra de Economía Nadia Calviño y con la de Hacienda, María Jesús Montero, ha dicho haber abordado el rescate de Air Europa, del que «estaba informado» Sánchez, y al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le ha atribuido la orden de garantizar la seguridad de un chalé alquilado para Delcy Rodríguez en el que se iba a reunir con el presidente del Gobierno y cinco ministros, incluido él.