Los Mossos d'Esquadra han detenido a un tercer agente de la policía catalana por su supuesta participación en la huida del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont tras su regreso a España pese a que tiene vigente una orden nacional de detención emitida por el Tribunal Supremo.
Según han informado este viernes a EFE fuentes policiales, el agente detenido está ahora en comisaría y pasará a disposición judicial en las próximas horas.
La policía catalana ha detenido hasta la fecha a tres agentes de los Mossos d'Esquadra por su presunta implicación en la huida de Puigdemont ayer en Barcelona -después de que regresara a España tras casi siete años en el extranjero-, donde protagonizó un acto en el paseo Lluís Companys antes de desaparecer.
Los otros dos agentes de la policía catalana detenidos están actualmente en libertad provisional sin ninguna medida cautelar, ya que la fiscalía tampoco lo ha pedido.
En el momento de su detención, los dos primeros agentes de los Mossos detenidos presentaron un 'habeas corpus', aunque el juzgado de guardia encargado de resolverlo desestimó la petición en ambos casos.
El 'habeas corpus' es una figura legal por la que cualquier ciudadano puede exigir comparecer de forma inmediata ante el juez para que este determine la legalidad de su detención.
El tercer arresto se ha producido el mismo día que la rueda de prensa del conseller de Interior en funciones, Joan Ignasi Elena, y el comisario jefe de los Mossos, Eduard Sallent, en la que han acusado a Puigdemont de haber tenido un comportamiento «impropio» de alguien que fue presidente de la Generalitat.
En la misma rueda de prensa, el comisario jefe ha sido muy duro contra los mossos detenidos por ayudar al líder de JxCat a regresar a Barcelona y volver a huir, lo que considera «reprobable, inaceptable y una afrenta al cuerpo»: «No merecen vestir nuestro uniforme», ha añadido.
El mosso detenido alega que prestó el coche en el que huyó Puigdemont a una amiga
El mosso d'esquadra titular del coche en el que huyó el expresident Carles Puigdemont ha alegado que prestó el vehículo a una amiga que va en silla de ruedas y que ya ha sido identificada en una rueda de reconocimiento con fotografías de varias tenistas puesto que practica ese deporte.
Así se desprende del atestado policial, al que ha accedido EFE, que los Mossos entregaron al juez que anoche dejó en libertad a este agente, detenido poco después de la huida de Puigdemont, tras desestimar el habeas corpus que presentó su defensa al considerar que su arresto fue ilegal.
El agente ha reconocido que era suyo el coche de la marca Honda y color blanco, conducido por una mujer y con el que Puigdemont y el secretario general de Junts, Jordi Turull, huyeron ayer de la zona del Arc del Triomf tras la efímera reaparición del expresidente catalán después de siete años fuera de España.
El vehículo, que llevaba una silla de ruedas en el asiento del copiloto, estaba estacionado en la salida de un aparcamiento en el tronco central del paseo Lluís Companys de Barcelona, justo detrás de donde se dispuso el escenario en el que intervino Puigdemont.
El agente detenido, que está de baja desde hace meses, adujo ante los policías que lo arrestaron que había prestado el coche con el que huyó Puigdemont a una amiga, en un intercambio, ya que ella le prestó su furgoneta. Según su versión, a la mujer le iba mejor el Honda porque estaba más adaptado el cambio de pedales, ya que utiliza silla de ruedas.
Además, sostiene que no habían hecho el cambio de nombre de los vehículos que intercambiaron porque era una persona de confianza.
Sin embargo, los Mossos d'Esquadra que fueron a su casa a preguntarle sobre si el coche era suyo resaltan en el informe policial que el agente no se mostró nervioso ni preguntó en ningún momento si había habido algún incidente ni si su amiga había sufrido algún accidente, antes de negarse a decir nada más si no era en presencia de su abogado.
La conductora del vehículo ya ha podido ser identificada por los Mossos gracias al agente de la Comisaría General de Información que comprobó sobre el terreno cómo Puigdemont y Turull subían al coche, ya que vio a la mujer e intentó perseguirla entre abucheos de los fieles del expresident, hasta que le acabó perdiendo el rastro.
En concreto, el agente ha identificado a la conductora a través de una rueda de reconocimiento con fotografías de ocho tenistas, entre las que la reconoció.