La Bisbal del Penedès quiere decorar calles y muros del municipio con murales.
El último ha quedado plasmado en la avenida Baix Penedès y es obra del artista de Barcelona Eslicer y del burgalés Christian Sasa.
El mural, con el título de La línea de la vida forma parte del proyecto Suite of Art en el que también participa el vecino de La Bisbal, Jaume Junqué. La obra representa el ciclo de la vida plasmado con un niño y un anciano.
Los autores explican que los trazos y combinaciones de blanco y negro representan las vivencias de una persona. La rosa es un guiño a la cultura catalana y los colores de los protagonistas de la obra también reivindica la igualdad.
Apuesta
La apuesta por este arte urbano en La Bisbal comenzó hace unos años plasmando obras a cargo de Jordi Romeu contra la violencia de género en los depósitos de agua de Can Gordei, l’Esplai i el Priorat. En vista del resultado se decidió extenderlo a otras zonas del municipio.
También se plasmó un mural de 14x2 metros con imágenes de las décadas de 1940 y 50 que muestran como eran los trabajos de batir el grano, una actividad que comenzó a hacerse a mano hasta que llegó la mecanización. Ese mural es también una muestra de la historia del municipio.
Romeu también ha pintado los murales del local social de L’Esplai y de la caseta de L’Era como trabajo final de sus estudios.
El Ayuntamiento señala la intención de incorporar más murales para mostrar ese arte urbano en puntos del municipio.