Vallado y con zonas de sombra, así será el Fòrum de la Colònia en octubre de 2025

Cuenta atrás para el inicio de las obras del Fòrum de la Colònia, que tiene un periodo de dieciocho meses para una puesta a punto que debe permitir poner en valor uno de los yacimientos más inhóspitos y desconocidos del conjunto monumental Patrimonio de la Humanidad.

El proyecto ya tiene luz verde por parte de la Comissió Territorial de Patrimoni Cultural de la Generalitat, lo que allana el camino de cara al inicio de unos trabajos que ya deberían estar en marcha, de acuerdo con el calendario que se planteó en un primer momento. «En febrero entró a la comisión el tema de la iluminación y el proyecto arquitectónico que se aprobó todo, con algunas observaciones que no implican una modificación del proyecto», asegura el concejal de Patrimoni del Ayuntamiento de Tarragona, Nacho García.

Ahora los servicios técnicos municipales están ultimando los informes de caminos y de ingeniería industrial, que constituyen el último eslabón antes de la licitación de los trabajos que ahora mismo se sitúa para «antes del verano».

Las consideraciones técnicas, las aportaciones recogidas durante el proceso participativo y el cambio de Gobierno a nivel municipal han comportado algunas modificaciones en al proyecto que se planteó, cuando en noviembre de 2021 se anunció la subvención de tres millones de euros. Estos los aporta el Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad, a partir de los fondos Next Generation, lo que ya marcaba las líneas estratégicas de una intervención que busca mejorar la accesibilidad, la sostenibilidad y la permeabilidad de un espacio muy desconocido incluso para los propios tarraconenses.

Uno de los aspectos que ha acordado el gobierno municipal es que se mantendrá el espacio vallado, desestimando una de las opciones que se planteó cuando se presentó el Parq Fòrum. Este hacía referencia a la creación de un gran parque arqueológico y urbano en el centro, donde los restos romanos dialogarían de forma abierta con las calles adyacentes, que se plantearon como peatonales.

Finalmente, para evitar el incivismo y el vandalismo sobre unos restos cuyo origen se sitúa alrededor del año 30 aC, el recinto permanecerá cerrado. No obstante, la reforma de las calles adyacentes garantizará que el conjunto «gane espacio», según detalla el edil socialista.

Uno de los puntos clave de esta reforma es que el monumento pueda ser accesible, ya que ahora la entrada es desde la calle Lleida, a través de una escalera sin rampas. Este acceso principal se trasladará a la calle Cardenal Cervantes, donde se ubicará la taquilla, los baños y una sala de audiovisual, que debe permitir que los visitantes puedan hacerse una ideal del papel que jugó este espacio, como centro neurálgico de la vida social y religiosa de la Tarraco romana.

Un tramo de Soler, peatonal

El proyecto también contempla que el tejado de estos módulos que se ubicarán en la entrada dispondrá de placas solares. En materia de accesibilidad destaca una segunda actuación de calado. Esta hace referencia a la sustitución del puente metálico de la calle Soler por una plataforma llana, de grandes dimensiones, que debe facilitar el paso entre las dos secciones del yacimiento.

En cuanto al interior, también está prevista la instalación de dos pérgolas que permitan generar sombra de cara a los visitantes, teniendo en cuenta que este es un espacio completamente al descubierto, con escasa vegetación, que no invita a una visita en las horas de más calor.

Respecto la peatonalización de las calles adyacentes, el proyecto tan solo incluirá el tramo de la calle Soler desde Gasòmetre a Cardenal Cervantes, ya que el Ayuntamiento aseguró que previamente tiene que solucionarse el acceso de vehículos al edificio de Correus.

El calendario es justo y el Ayuntamiento de Tarragona no puede dejar pasar el tiempo si no quiere perder los fondos europeos, que tienen fijado como plazo el 31 de octubre de 2025. Si antes del verano se licitan las obras, estas podrían ponerse en marcha a finales de este mismo año, teniendo en cuenta que la duración prevista de los trabajos se sitúa en «ocho meses», según concreta el responsable municipal de Patrimoni. En paralelo, también se está avanzando para sacar a licitación la segunda fase del proyecto, que es la que hace referencia al plan de museización del espacio. Al respecto, la idea es que los visitantes se encuentren con un audiovisual similar al videomapping de la Volta del Pallol, en el que a través de la historia de la joven esclava Melpomene, el público puede sumergirse en una experiencia inmersiva, que lo traslada a la Tarraco de hace más de 2.000 años.

Esta reforma integral del Fòrum de la Colònia se pondrá en marcha, después que en diciembre de 2020 la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de Tarragona llegaron a un acuerdo mediante el cual la administración autonómica cedía de forma gratuita a la ciudad el monumento, durante un periodo de 50 años. Ambas partes se pusieron de acuerdo en la fórmula de una concesión demanial para desencallar una negociación largamente perseguida.