Un estudio revela que las poblaciones de peces en Catalunya no están en peligro
El informe, elaborado por ICATMAR, contradice los estudios de la Comisión Europea, y asegura que las especies pesqueras se encuentran «dentro de límites biológicos seguros»
«Las poblaciones de peces se encuentran dentro de los límites biológicos seguros». Esta es la principal conclusión a la que llega el informe elaborado por el instituto oceanográfico de Catalunya, llamado ICATMAR, y que pretende arrojar luz sobre el estado de la pesca en Catalunya en el año 2023. El informe también revela que las especies evaluadas –que son la merluza, el salmonete, la cigala, la gamba blanca y la roja– muestran niveles de biomasa por encima de los mínimos que garantiza el buen estado de las especies a largo plazo.
Este informe contradice la versión que la Comisión Europea defiende y que le sirve para seguir implementando restricciones a los pescadores. Desde Europa aseguran que el comité científico –formado mayoritáriamente por grupos ecologistas– determinan que las especies marinas del Mediterráneo están en peligro. Avalándose en estas conclusiones, desde la Comisión se propone que, a partir del año que viene, los pescadores puedan salir a faenar solo 28 días al año, medida que sentencia de muerte a un sector que lleva años agonizando.
En esta misma línea, la Comisión Europea tiró adelante en 2020 un plan plurianual que contemplaba la reducción progresiva de días de pesca durante cuatro años. El objetivo era dar tiempo y descanso a la mar para que esta se regenerase. Ahora, a las puertas de poner punto final al plan, Europa se pone más dura y propone reducir a menos de un mes al año los días de pesca.
Sin embargo, tanto desde las federaciones de pesca como desde la Generalitat defienden que hay un informe elaborado por ICATMAR que desmiente la versión de la Unión Europea.
El estudio revela que todas las medidas que se han llevado a cabo en los últimos años –como por ejemplo la adaptación de las redes, los tres meses de parada biológica o la reducción de la jornada laboral–, «están teniendo efectos positivos rápidos sobre los recursos pesqueros». Además, según el documento, las observaciones in situ evidencian que, en las zonas donde estaba prohibida la captura de peces, se ha aumentado la población y «se ha recuperado el hábitat».
Otro de los puntos destacados del estudio es que, según los científicos de ICATMAR, «es urgente» revisar los métodos oficiales de evaluación pesquera, «ya que existe un fuerte contraste entre los resultados obtenidos por nuestro estudio con los derivados de otras metodologías».
Según ICATMAR, el estudio se ha hecho a través del modelo SPiCT –Stochastic Production Model in Continuos Time–, ampliamente aceptado en organismos internacionales.
Cuatro años de esfuerzo
La medida que quiere imponer la Comisión Europea sobre los pescadores y que se debatirá el próximo lunes y martes en Bruselas representaría la fin del sector. El colectivo asegura que ninguna empresa sería viable si solo le dejarán trabajar un mes al año. La propuesta es relevante ya que se fija sobretodo en la modalidad del arrastre. Un tipo de pesca que representa el 37% de la flota pesquera total, un 38% de los desembarcos y el 59% del valor total de pescado que se vende.
Durante estos últimos años, el sector catalán ha hecho un esfuerzo importante, reduciendo los días de pesca, cerrando los caladeros y haciendo vedas durante al menos tres meses. La intención era conseguir los objetivos de recuperación de las poblaciones de peces. Para hacernos una idea, las capturas de la flota del arrastre en Catalunya bajaron a 6.192 toneladas en 2023 contra ñas 7.854 en 2019. Un 21% menos que cuatro años atrás. La flota también se redujo, de 224 embarcaciones a 202 en 2024. Y por no hablar de los días de pesca. En 2018, se pescó 184 jornadas de media, mientras que en 2013, 159. Además, la flota mediterránea acordó cerrar voluntariamente 20 zonas donde no poder pescar.
Con este informe sobre la mesa, la Generalitat de Catalunya asegura que «no hay ninguna base para adoptar medidas correctoras de emergencia en aguas catalanas», y pide a la Comisión Europea que «las posibilidades de pesca de 2025 deberían mantenerse cautelarmente a los niveles de 2014 o 2023». La próxima semana se votará si la propuesta de los 29 días tira adelante o bien queda paralizada.
Los pescadores irán a manifestarse a Madrid
Los pescadores de los puertos tarraconenses han organizado autobuses para poder desplazarse el próximo lunes día 9 de diciembre hasta Madrid. La intención es celebrar una manifestación para mostrar su disconformidad con la propuesta que defiende la Comisión Europea y que, de ser aprobada, significaría el fin de un sector que lleva años pasándolo mal.
Los pescadores que no viajen hasta la capital española se concentrarán a las puertas de sus cofradías para leer un manifiesto y mostrar su apoyo al ministro español, Luis Planas, quien tiene el cometido de defender el futuro de la pesca del Mediterráneo en la reunión que se celebrará en Bruselas.