Tarragona: Ultimátum de la Justicia a los propietarios de Ca l’Ardiaca

Un auto obliga a los titulares de este palacete medieval de la Part Alta a segregar una parte que no les corresponde. Tienen de fecha límite hasta el 28 de febrero. La decisión judicial deja todavía más en el aire el proyecto de hotel

El magistrado del Juzgado de Primera Instancia número 7 de Tarragona ha dictado recientemente un auto que puede marcar el futuro de Ca l’Ardiaca, el palacete medieval del Pla de la Seu de Tarragona que debería convertirse en un hotel de lujo en la Part Alta de la ciudad.

La resolución judicial, a la que ha tenido acceso el Diari, obliga a los titulares de Ca l’Ardiaca, la empresa aragonesa Desarrollos Arbe a «proceder a realizar las obras para reconstruir la propiedad y devolverla al estado en que se hallaba antes de su intervención, devolviendo la posesión a la parte ejecutante» en un término de tres meses desde el 28 de noviembre.

Las obras mencionadas corresponen al edifició anexo (véase la foto) propiedad del Grupo Inmobiliario Ferbor. En otras palabras, ese anexo, se debe acondicionar para poderla separar de la finca principal e inscribirla en el Registro de la Propiedad.

El auto judicial, iniciado en 2013 por una dilación burocrática (se inscribió Ca l’Ardiaca con este local anexo que debía haber quedado al margen), termina separando las fincas y dando la razón a Xavier Ferrando, la cara visible de la sociedad inmobiliaria Grupo Inmobiliario Ferbor.

Este auto también, pone en evidencia la problemática entorno al proyecto de hotel de lujo del que se lleva hablando décadas en este lugar idílico de la parte histórica de Tarragona. Un problema arquitectónico porque el inmueble que debe ser separado e inscrito como tal en el Registro, forma parte del que sería este alojamiento de lujo de la ciudad.

De momento, el auto judicial dictado el pasado 28 de noviembre obliga a los titulares de Ca l’Ardiaca a que en un plazo de 3 meses lleven a cabo estas obras de separación de las fincas e inscribir el local saliente en el Registro de la Propiedad número 1 de Tarragona.

A su vez, el juez ordena que Desarrollos Arbe asuma las obras necesarias para que el local recupere la ‘independencia’ de Ca l’Ardiaca. Y en caso de que no cumpla, el juez abre la posibilidad de que la parte ganadora del litigio -Xavier Ferrando y Grupo Inmobiliario Ferbor- haga las obras y luego pase la factura de los trabajos a Ca l’Ardiaca.

El local de Ca l’Ardiaca (pintado de gris) que debe segregarse del palacete medieval. Este local tiene una superficie aproximada de 150 metros cuadrados. Foto: DT

La resolución judicial es firme y el magistrado remarca que no cabe recurso alguno contra su decisión.

La contraoferta

Sin embargo, Desarrollos Arbe se ha puesto en contacto con Xavi Ferrando para hacerle una contraoferta a la separación de las fincas. Según admite el propio Ferrando, la propiedad de Ca l’Ardiaca tendría avanzado un preacuerdo con la consultora Horwath HTL para poder llevar una venta y que fuera esta sociedad la que llevara a cabo el proyecto hotelero en Tarragona.

Según el propio Ferrando, la oferta consistiría en un porcentaje inferior al 5% del precio de venta (fuera cual fuera). Pero Xavier Ferrando ya ha informado a Desarrollos Arbe que rechaza la oferta.

El empresario ha confirmado al Diari que «he contestado a su oferta con otra económicamente más acorde a lo que vale el local y les he dado hasta mediados de enero para recibir una respuesta».

El mismo Ferrando alerta que si la contraoferta que él ha propuesto es desoída por la empresa zaragozana, «iré hasta el final para recuperar lo que nos pertenece». Y este pulso podría incluso terminar en una demanda por daños y perjuicios y pedir la subasta de Ca l’Ardiaca como medida compensatoria.

Los antecedentes

El Grupo Inmobiliario Ferbor solicitó el pasado 5 de junio la ejecución forzosa de una sentencia dictada el 29 de junio de 2018, en base a la cual el juez reconocía que el número 2 del Pla de la Seu es un local independiente, propiedad de esta sociedad, que no forma parte del edificio patrimonial de Ca l’Ardiaca.

La petición llega después que en el año 2020 ya hubo una sentencia firme al respecto, en la que se requería a los dueños del palacete medieval del Pla de la Seu que «realizaran las obras pertinentes para reconstruir la propiedad y devolverla al estado en que se hallaba antes de su intervención». Así lo recogía la sentencia de la Audiencia Provincial de Tarragona.

Este Diari ya se hizo de la precaria situación de Ca l’Ardiaca tras la lluvías de la primavera y el otoño. Si no se actúa de forma inmediata el riesgo de perder todo el edificio -una joya del Gótico- es una realidad.