Tarragona mantiene un buen ritmo turístico a las puertas de noviembre
El buen tiempo y la alta afluencia han alargado la temporada estival, que ahora se junta con el turismo empresarial. La oferta cultural de estos días acompaña a las buenas previsiones
El tiempo otoñal se ha instalado El tiempo otoñal se ha instalado definitivamente en Tarragona después de un verano anormalmente alargado. El mes de noviembre asoma con la celebración de Todos los Santos el miércoles que viene, una situación que provoca que muchos trabajadores no cojan puente. De esta forma, uno de los principales días del calendario turístico del otoño quede algo descolgado.
No obstante, el sector turístico de la ciudad mantiene unas expectativas altas para este fin de semana y el siguiente, con un volumen de actividad que parece no haber descendido desde la entrada del verano. Así lo relata Jordi Vilar, presidente Associació d’Apartments Turístics i Hostels de Tarragona, quien manifiesta que «aunque entre semana ha bajado el ritmo, durante los fines de semana no se ha notado el cambio».
Y es que los buenos datos de este verano se han cruzado de cara con el movimiento de trabajadores y el turismo empresarial. Vilar detalla que, en días hábiles, los trabajadores del Port y de los polígonos industriales se están haciendo notar especialmente. El presidente asegura que este tipo de cliente ocupa entre un 30% y un 40% de la actividad actual. En lo que respecta a los fines de semana, Vilar mantiene que la ocupación se sitúa por encima del 80 %.
Desde la restauración respaldan estas afirmaciones, Ángel Pérez, dueño de El Pósit y representante de la Associació d’Empresaris d’Hostaleria de Tarragona, asegura que «los grupos de empresa empiezan a ser una presencia importante en los restaurantes», esto acompañado de unos festivos donde «se mantiene una buena línea, sin notar el habitual bajón de octubre».
Pérez, quien también cuenta con un restaurante en Cambrils, afirma que «Tarragona tiene la suerte de no decaer notablemente fuera del verano». Los esfuerzos por apuntar a la desestacionalización del ayuntamiento y las federaciones empresariales, como son las jornadas del romesco, parecen «comenzar a dar sus frutos» para Pérez. Durante el próximo miércoles, el representante espera recibir «un aumento de los clientes locales», sin grandes expectativas por los comensales de fuera.
En los hoteles, sin embargo, la situación de este festivo les resulta en contra. Francesc Jornet, presidente de la Associació d’Hotelers de Tarragona Ciutat, confirma que «el hecho de romper la semana, impide el movimiento del turismo corporativo», una de las principales fuentes de ingreso hoteleras durante estas fechas.
No obstante, Jornet reitera que «los fines de semana están contando con grandes resultados, que rozan la plena ocupación».
Por último, desde la asociación comercial Via T, Raquel Pizarro asegura que los empresarios «mantienen las ganas que han vivido durante el verano», asegurando que la imagen de «un turista activo que se mueve por la ciudad se ha vuelto un habitual», impactando directamente en el pequeño comercio.
Agenda repleta
Las buenas expectativas de estos diez días vienen acompañadas de una buena agenda cultural, deportiva o gastronómica en la ciudad. Durante este primer fin de semana, se ofrecerán algunas actividades vinculadas a lo terrorífico, como una visita patrimonial centrada en las historias ocultas, una fiesta de Halloween o un pasaje del terror.
El primer fin de semana de noviembre supondrá el plato fuerte con la clásica Embutada, la fiesta del vino joven de la ciudad o la Mitja Marató Ciutat de Tarragona, que espera atraer a 1.500 deportistas el próximo 5 de noviembre. A estos eventos hay que sumar el Tarrorific, evento de visitas a la ciudad vinculadas al mundo de la muerte que tendrá lugar durante el 3 y el 4 de noviembre.
La regidora de Turisme de Tarragona, Montse Adán, asegura que «el objetivo de la gestión turística del gobierno es que la ciudad se convierta en una destinación activa durante todos los días del año». Para ello, Adan manifiesta que es necesario potenciar el turismo deportivo, gastronómico, empresarial o de eventos, creando una oferta «más integrada, accesible y repartida durante todos los momentos del año».
En cuanto a cultura, Tarragona mantiene durante este otoño diferentes propuestas artísticas de larga duración como puede ser el festival SCAN, la oferta del Mèdol o la temporada otoñal de artes escénicas.