La marea amarilla invade el centro de Tarragona

La actividad más inclusiva de la celebración, la Festa per a Tothom, llega su edición número 34 con casi 300 participantes

Fiesta en mayúsculas este sábado en el centro de Tarragona con una marea de color fosforito que invadió la Rambla Nova de música, alegría y color. La Festa per a Tothom volvió a salir a la calle por las Festes de Santa Tecla en un acto que reunió a casi 300 personas y que cada año organiza DOW, sus empleados y voluntarios.

Si hasta ahora la fiesta se centraba en una concentración en el Balcó del Mediterrani –aparte de la comida de hermandad posterior–, este año se ha querido que para animar y tener más visualización –además de un tema logístico de los autobuses– se hiciera una concentración en la Rambla Nova, a la altura de la Estàtua dels Despullats. Allí estaban los miembros de la Colla Gegantera Frida así como otros invitados a la fiesta, que han ido en pasacalles hasta el Balcó del Mediterrani.

Durante el pasacalles se han ido intercambiando los portadores de la geganta Frida. En esta ocasión, estaban acompañados por los Nanos Nous de Tarragona, la Colla de Santa Coloma de Queralt y la geganta Flora.

Y es que una actividad que comenzó con el Centre de Paràlisis Cerebral la Muntanyeta se han ido sumando otras entidades y colectivos, como Estela y la Residència Sant Salvador, con personas con capacidades diferentes y que pueden disfrutar de esta manera de muchos actos de las fiestas.

La concejala de Igualtat, Serveis a la Ciutadania i Serveis Socials del Ayuntamiento de Tarragona, Cecilia Mangini, recordó que en las fiestas de este año se han tenido en cuenta aspectos para las personas con necesidades diferentes, como unas mochilas vibradoras para sordos, la calle Santa Anna en silencio y también actos con traducción en el lenguaje de signos, como este de la Festa per a Tothom.

Tuvo recuerdos para Romà Solé, uno de los artífices de la fiesta y que estaba entre los asistentes, y que el viernes fue nombrado Perpetuador de les Festes por «una vida dedicada a la inclusión, un premio que se extiende a toda la peña» presente.

Si cada año, Romà Solé dedicaba unas palabras, en esta edición prefirió declinar tomar el micrófono. Sí lo hizo Ignasi Cañagueral, director del Complejo Industrial de Dow Tarragona, quien reconoció estar «muy orgulloso de ver la marea amarilla» y de que la fiesta haya cumplido 34 años. Y ya avanzó que «el próximo año volveremos a estar, a hacer fiesta». Y emplazó a los presentes a participar en los actos de la Festa per a Tothom, como la Santa Tecla Petita, el Pregó, la Professó y el castillo de fuegos artificiales.

Destacó el orgullo que supuso la creación de la Colla Gegantera Frida y recordó a su creador, Romà. Tras unas palabras del presidente de la Autoritat Portuària, Saül Garreta –los participantes comieron en el Tinglat número 2–, el alcalde, Rubén Viñuales, mencionó «vuestros 34 años de lucha para tener un acceso igualitario a la fiesta». Recordó también las novedades introducidas este año «pero todavía quedan muchas cosas por hacer». También amables palabras para Romà Solé, «que representa lo mejor de todos vosotros», con su «sonrisa, sus valores, que mira siempre con optimismo a la vida».

Después de la foto oficial de familia de cada año, los diversos elementos folklóricos hicieron un baile antes de ir al Port en pasacalles.