Romera: «Debería actuarse con celeridad con los pisos turísticos, porque sino tendremos un problema»
Las renovables y el suelo agrícola deberían tener un papel protagonista de cara a la redacción del futuro POUM. «Forma parte de nuestra responsabilidad», afirma el representante de los arquitectos
¿La prórroga de las normas subsidiarias urbanísticas puede comportar un estancamiento de la actividad?
No me atrevo a decir que puede comportar un estancamiento, porque todo lo que se permitía en su momento sigue vigente, pero sí que hay un estancamiento del progreso. Representa una parálisis de la oportunidad que tiene Tarragona de ser una ciudad moderna, actual y que apueste por la movilidad sostenible o la cohesión de los barrios. Esta idea que se incluía en avance del POUM, que creo que era un gran avance. La música sonaba bien.
¿Qué música suena ahora?
No me atrevo a decirlo, porque la parte preocupante es que no tengo inputs. Quizás lo que suena es más un silencio que música. Falta conocer las expectativas del nuevo gobierno.
¿No se han reunido todavía?
Lo que me interesa es conocer la opinión del alcalde y del nuevo concejal de Urbanisme, pero todavía no nos hemos reunido. Sin embargo, creo mucho en el equipo redactor, que me consta que ha recibido informes sectoriales, que cuestan mucho de conseguir, con muy buena nota.
El debate siempre se centra en crecer o no crecer. ¿Qué opina?
No creo que este sea el kit. Crecer bien es bueno, hacerlo mal no. Tarragona debe tener capacidad de adaptarse al futuro y a las necesidades de vivienda. Sin embargo, no debe plantearse de una forma desorbitada o desordenada, si no a partir de conceptos como la descarbonización y los entornos saludables.
¿Cómo debe trasladarse esto en el futuro POUM?
El debate no está tanto en cuántas viviendas hay que hacerse en Tarragona sino en dónde construimos.
Hay dos modelos muy diferenciados: Llevant o Ponent.
Particularmente soy partidario de lo que planteaba el avance, es decir, crecer por el Francolí. Si todos somos conscientes de que Tarragona son muchas Tarragonas, podemos empezar a trabar esta ciudad única por el punto más fácil y más interesante. Esto significa solucionar muchos temas, como una conectividad cómoda, verde y social, que no existe. O problemas como la CLH, que allí está y debemos darle una salida urbana. El Francolí puede generar la nueva centralidad que necesita Tarragona, recosiendo los barrios.
Es una zona con riesgo de inundabilidad y muy próxima a la Química.
Esto lo marcarán los informes, porque tanto el ACA como Protecció Civil son especialmente cuidadosos con estas cuestiones. Apelar al miedo me parece innecesario, porque ya hemos visto donde está el riesgo químico y no precisamente es la zona del Francolí.
¿Proyectos como la Vall del Llorito o La Budellera deberían aparcarse?
No seré yo quien haga de político, pero entiendo que no puede hacerse lo que se preveía antes. Si siguen adelante debería ser de una forma más sensible, no tan especulativa y siendo muy conscientes de lo que comporta.
La apuesta del Gobierno es que la Horta Gran recupere su papel agrícola. ¿Es incompatible?
Para nada. De hecho, hace unos días hicimos una jornada en el Col·legi y una de las cuestiones más interesantes que salió es que los planeamientos deberían incorporar suelo agrícola, además de espacios para las renovables. Es una absoluta necesidad de abastecimiento y de tratamiento del territorio, porque cada vez somos más sensibles respecto a la circularidad de la economía como valor de sostenibilidad y proximidad.
¿Todo esto debería incluirse en el nuevo documento?
El futuro pasa por una convivencia entre el crecimiento y que el territorio tenga un suelo agrícola, por lo que toca generar las herramientas que nos permitan ir al mercado y comprar productos hechos en casa. Mientras que si pensamos nosotros a dónde queremos las renovables no nos las pondrán. Forma parte de nuestra responsabilidad.
Las ciudades han puesto el acento en las peatonalizaciones y refugios climáticos. ¿Se va con retraso?
Estamos muy lejos. El concepto de cómo deben ser nuestras calles y cómo debe ser la movilidad se ha transformarlo salvajemente. El coche no debe tener el protagonismo que ha tenido hasta el momento. Hay que dar espacio a la gente para que pueda estar en la calle, con sombras y espacios confortables. Y lo que vemos es que cuando se prueba tiene mucho éxito, porque es natural.
¿Los pisos turísticos son un problema?
Siempre se habla de Barcelona, pero la proporción de viviendas turísticas en la Part Alta es más alta que en Barcelona. Si es un problema salvaje en Barcelona aquí también, y como arquitectos debemos ser sensibles a los problemas urbanos. Para quién queremos las ciudades. Las ciudades son de todos, no para los que pueden pagarse un buen piso, excluyendo o expulsando a los más vulnerables. Para el Ayuntamiento es muy fácil poder decir basta con un decreto.
¿Y qué haría?
Hay alternativas inteligentes a los problemas que están generando la presencia de estas viviendas y Tarragona debe hacer algo con urgencia. Debería actuarse con celeridad, porque sino tendremos un problema, ya que se convertirá en una zona especializada con calles vacías y gente que viene de fuera. Por sus características podría ser un barrio para estudiantes o parejas jóvenes. ¿Por qué no pones transporte gratuito entre Sescelades y la Part Alta para favorecerlo?