La residencia La Mercè de Tarragona estrena las nuevas plazas este mes de mayo
Se activarán más de dos años después de que terminaran las obras de ampliación del equipamiento, que ha permitido llegar a disponer de 63 puestos más. Dos usuarios del centro ICASS de Reus, los primeros que los ocuparán
Han tenido que pasar más de dos años para que se activen las 63 plazas que fueron creadas en la Residència de Gent Gran Mare de Déu de la Mercè a raíz de las obras de remodelación del edificio, que empezaron en el año 2019.
Después de la finalización de las obras, la asignación de las nuevas plazas de la residencia, que hoy por hoy tiene una lista de espera de un año y un mes, corría a cargo del Departament de Drets Socials ponerlas a disposición.
El motivo de que no se hiciera, según explicó en su momento el Departament, es que aún no se había ocupado el 100% de plazas que había antes de la remodelación.
La voluntad era empezar a asignar los nuevos puestos a finales del pasado 2023. A principios de 2024, Drets Socials indicó al Diari que la residencia estaba «en proceso de preparar y tener listas las plantas nuevas para que puedan ocuparse en breve».
En paralelo, se tramitaron los contratos de servicios externos (como el mantenimiento, la lavandería, la limpieza y la cocina) «para dimensionarlos en consonancia con la capacidad ampliada», según el Departament.
Cuatro meses después, la intención es que «antes de que se termine el mes de mayo, se produzcan los primeros traslados a la planta cuatro».
Según se especuló, aunque Drets Socials no ha querido confirmarlo, la prioridad a la hora de llevar a cabo estos traspasos serían los usuarios de la residencia ICASS de Reus.
De hecho, el Diari ha podido saber que, por el momento, dos personas residentes ya han firmado para trasladarse hasta las instalaciones de La Mercè en Tarragona de forma inminente. El centro ICASS de la capital del Baix Camp comenzará próximamente un proceso de reforma que, según la Generalitat, impide que haya actividad en el edificio.
Después de valorar varias alternativas, el Departament tomó esta decisión a raíz de un informe donde se exponían problemas estructurales importantes que recomendaban el cese de la actividad en las instalaciones.
No obstante, usuarios, familiares y empleados quieren quedarse mientras se lleva a cabo la reforma. Han recogido ya cerca de 10.000 firmas.
En cuanto a los trabajadores, el Departament de Drets Socials ya ha empezado a reubicarlos en otros centros titularidad del Departament en el Camp de Tarragona y en Terres de l’Ebre. En concreto, este traslado provisional se efectuará, mayoritariamente, a la residencia de la Mercè.
Más de cinco millones
Las obras de remodelación de la residencia tarraconense costaron más de cinco millones de euros y, en teoría, iban a durar dieciocho meses, pero se alargaron dos años.
Las intervenciones afectaron a las plantas dos, tres y cuatro, que es donde se construyeron los nuevos módulos residenciales.
Cada planta tiene una capacidad para 21 usuarios y en ellas hay un comedor, salas de estar y dormitorios. En total, las 63 nuevas plazas se dividen en 26 habitaciones dobles y 11 individuales.
En la primera planta, se ubicó el servicio de lavandería, el de mantenimiento y los vestuarios del personal.
Las obras también supusieron la ampliación de servicios generales con una nueva sala de reuniones, una sala de motricidad, despachos de atención primaria y podología, un despacho de fisioterapia, un montacargas, un espacio cubierto por acceso a las ambulancias y servicio de transporte sanitario, entre otros.
La residencia fue inaugurada el 1 de julio del año 1977 y es de la Generalitat de Catalunya desde 1996. Hace justo catorce años, en 2010, ya se llevó a cabo un primer proceso de remodelación, que afectó a las plantas situadas entre la quinta y la decimotercera.