Placas solares y tecnología LED: invertir para ahorrar
Los ayuntamientos buscan la forma de reducir el gasto energético frente al constante aumento de los precios de la luz y el gas
Los ayuntamientos de la provincia de Tarragona, como prácticamente nadie ha hecho, tampoco se han librado del aumento desproporcionado de las facturas energéticas. Varia en cada caso, pero en todos son aumentos importantes que obligan a las instituciones a buscarse la vida para reducir el gasto. Y todavía más cuando se acercan elecciones, y la opción de subir los impuestos a la ciudadanía –que ya bastante mal lo está pasando–, por poco que sea, no es una buena idea.
Algunos ejemplos de estos incrementos del precio de la electricidad son el caso de El Vendrell, donde para el presupuesto de 2023 han reservado una partida de 1 millón de euros, respecto a los 600.000 para este 2022; el aumento del 55% del gasto de 4 millones de euros en 2019; los 970.000 euros que se gastarán en Torredembarra en comparación con el gasto anual de 560.000 antes de que empezaran a subir los precios; o el aumento del 21% en La Ràpita, donde han pasado de pagar 29.500 euros a casi 36.000 por el alumbrado público y el de los equipamientos.
Y para hacer frente a este encarecimiento, son varias las medidas e inversiones que están llevando a cabo los consistorios.
En El Vendrell, por ejemplo, han invertido 800.000 euros en la substitución de las farolas por nuevas con tecnología LED, que defienden que «cada farola reduce el consumo a la mitad». Con el mismo objetivo, han empezado a substituir las calderas de gas por bombas de calor que generan más aire acondicionado en los cinco edificios de las Escola Bressol.
El Ayuntamiento de Reus, por su parte, ha puesto en marcha el apagado, a partir de las 22 horas, del alumbrado ornamental de los espacios y edificios municipales y las fuentes ornamentales de la Plaza de las Ocas, la Avenida Sant Jordi, la Plaza del Canal y la rotonda de la Avenida Tarragona –el campanario de San Pere mantiene la iluminación ornamental por su carácter singular–. Asimismo, desde 2016, el ayuntamiento ha renovado progresivamente las luces de oficinas municipales por modelos más eficientes para reducir el consumo eléctrico y su coste económico. También se han sustituido en el alumbrado público de la ciudad las luces de vapor de mercurio por modelos LED, más eficientes. En esta línea, desde hace años se promueve la instalación en los edificios municipales de proyectos de autoconsumo que, con la creación de Reus Energia, ha visto un nuevo impulso con la ampliación de su capacidad de producción eléctrica.
En este sentido, Valls, además de haber conseguido ya que un 57% del alumbrado público sea de tecnología LED, está trabajando en una propuesta técnica para instalar alrededor de 3.000 placas solares en las cubiertas de edificios municipales, entre ellos el edificio del ayuntamiento pero también equipamientos deportivos, educativos o culturales. El objetivo es que los edificios no sólo pasen a ser 100% sostenibles energéticamente, sino que puedan obtener incluso un excedente de electricidad por otros usos. Torredembarra también trabaja para reducir el gasto, con alumbrado LED y detectores de proximidad, entre otros.