Los motivos de la ‘fuga’ de cerebros de médicos en Tarragona
El poder de atracción de las grandes ciudades y las mejores condiciones laborales provocan que los facultativos abandonen la demarcación hacia otros puntos de Catalunya y el extranjero
Las 453 ‘fugas’ de médicos que ha habido en cinco años hacia el resto de demarcaciones de Catalunya, del Estado o al extranjero se distribuyen en las 57 de 2017, las 68 de 2018, las 77 de 2019, las 88 de 2020, las 75 de 2021 y las 88 de 2022. Es un 54,4% más en cinco años.
Eso sí, en 2022, tan solo un 5,5% marcha al extranjero, mientras que un 25,1% lo hace al resto de Catalunya y un 38,6% a algún punto del Estado. El porcentaje restante se corresponde con las defunciones y con otras causas.
Los motivos son diversos, tal y como apunta el doctor y secretario del Col·legi Oficial de Metges de Tarragona, Manuel Carasol: «Puede ser que haya profesionales que tengan un arraigo familiar fuera o que hayan venido a cursar el MIR a Tarragona y a los que el territorio no les resulte tan atractivo».
«Sobre el resto, cuando te marchas, muchas veces es porque las condiciones que te ofrecen aquí –que distan de ser las mejores– son peores que las que puedes conseguir fuera», añade.
La delegada del sindicato CATAC-CTS en el Hospital Joan XXIII, Marina Roig, manifiesta que «no es que el problema vaya a venir dentro de unos años, sino que ya existen dificultades para que se cubran puestos en centros determinados donde no se encuentran profesionales que quieran quedarse».
El presidente de la Assemblea Territorial de Metges de Catalunya, Francesc París, señala que «como hay mucha demanda, los profesionales escogen el lugar que mejores condiciones les ofrece».
También influye la capacidad de atracción del territorio: «Tarragona tiene las limitaciones que tiene y la oferta es la que es», indica Carasol.
Entra aquí el centralismo de capitales como Barcelona, con un mayor poder de captación. «No somos capaces de retener el talento que se genera en Tarragona porque la oferta no es tan variada», argumenta el secretario del COMT.
En palabras de la gerente de la Regió Sanitària del Camp de Tarragona, Imma Grau, «es natural que Barcelona y su área de influencia capten buena parte de esos nuevos profesionales, pero el Camp de Tarragona también tiene potencialidad para atraer».
En esta línea, París argumenta que «la formación aquí es muy buena y la gente está bien preparada, así que el objetivo tiene que ser que se queden».
Desde la Regió Sanitària comentan que «está poniéndose en marcha un plan para la retención del talento teniendo en cuenta los diferentes aspectos que inciden en la problemática».
Roig remarca que «hay una necesidad imperativa de abrir las universidades y que haya más plazas para que más personas con vocación asistencial puedan acceder».
Una de las prioridades, según los profesionales, es la de dar incentivos para demorar la jubilación mientras se efectúa el relevo generacional.