Los vecinos y vecinas del Cós del Bou perpetúan Sant Roc
Tradición. Este año, la calle Cós del Bou conmemora los 179 años de vida de las fiestas de Sant Roc. Unas fiestas que son posible gracias a la unión de los vecinos y vecinas del barrio
Del 14 al 16 de agosto el carrer del Cós del Bou se volverá a llenar para conmemorar los 179 años de vida de las fiestas de Sant Roc.
Unas fiestas que dieron el pistoletazo de salida este lunes. A las seis de la tarde, familias, vecinos y vecinas del barrio se concentraron en el carrer Cós del Bou dispuestos a disfrutar de la tradicional cercavila.
El cañón fue el encargado de dar paso entre la multitud. Detrás, los timbalers del Drac Petit de Sant Roc, el Maginet de les Timbales, els Gegants Vells Petits, los grallers Brufacanyes, los Negritos y Gegants Infantils, los Nanos y el Nano Caleto y los Gegants Vells de Tarragona. Estos últimos acompañados por unos históricos: los Bordons.
Después de recorrer diferentes calles de la ciudad, la cercavila acabó en el mismo lugar que había empezado hacía apenas una hora.
Fue justo en este momento cuando el local de la Colla Jove Xiquets de Tarragona acogió el pregón a cargo de Josep Bertran. Bertran es el responsable de comunicación y relaciones públicas de Repsol. En más de una ocasión ha colaborado y ha aportado su granito de arena para que las fiestas de Sant Roc continúen siendo una realidad.
«Para mí es un honor. Me siento muy privilegiado, aunque soy consciente que es una gran responsabilidad. Aun así, intentaré que las cosas vayan bien y que todos los presentes salgan contentos y satisfechos», aseguraba Bertran minutos antes de empezar su intervención.
«El barri de Sant Roc lo comparó con la aldea de Astérix y Obélix porque conservan la esencia de muchas cosas. Solo hace falta pasear por esta calle y conocer a los vecinos y vecinas», añadía.
Pero para que esta esencia se conserve, lo cierto es que hace falta que la gente continué implicándose en las fiestas.
L‘Associació Cultural de Sant Roc no perdió el tiempo y aprovechó la ocasión para pedir soporte por parte de las administraciones públicas, pero también por parte de los vecinos y vecinas del barrio.
«Somos muy poca gente que trabajamos con el corazón. Nos encontramos que no existe una generación joven que herede la fiesta y esto nos preocupa. Las fiestas de Sant Roc son tradición y forman parte de la historia de Tarragona, no hay que perderlas» explicaban desde la asociación.
Instantes después del pregón, tuvo lugar la entrega del Canoner d‘Honor 2023. Este año el reconocimiento fue para la Floristeria Romeu. Una bonita manera de agradecerles su colaboración durante tantos años.
«Estoy muy contenta. La verdad es que no nos los esperábamos. Precisamente por esto, la ilusión es doble. Llevamos muchos años colaborando con las fiestas de Sant Roc y es una bonita manera de reconocerlo», comentó el alma del negocio, Tecla Amigó. Y es que parece que este 2023 es el año de la floristería. Además de convertirse en el Canoner d‘Honor, este año cumplen cincuenta años de vida. «La verdad es que está siendo un año muy completo y especial. No nos podemos quejar», añadió Tecla con una sonrisa.
Antes de dar por finalizado el acto, se proclamó a la nueva pubilla. Este año la elegida ha sido Lídia Marquès. Por su parte, Enia Mañé y Núria Vendrell serán las Damas de Honor de estas fiestas. Si en algo coinciden las tres es el amor incondicional que sienten por Sant Roc y en especial por estas fiestas centenarias.
Aunque Enia y Núria este año desarrollan el papel de Dama de Honor, las dos reconocen que en un futuro próximo les gustaría ser Pubilla. «Mi madre fue Pubilla hace unos años. A mí también me haría mucha ilusión, pero aún no tengo los dieciocho años», asegurava Enia.
A la finalización del acto, se hizo un homenaje póstumo a Roger Blaya, conocido como el “Murciano“. Durante muchos años, Blaya se encargó de llevar al burro del Maginet de les Timbales y el carro por el agua de Sant Roc.
Fue precisamente en este momento cuando la emoción se desató y más de uno no pudo evitar emocionarse.
Los encargados de poner punto final al primer día de las fiestas fueron la orquesta Angangas y DJ Pubilla.
El carrer Cós del Bóu se convirtió en una auténtica fiesta. No cabía ni un alfiler. La alegría se convirtió en la auténtica protagonista.
Esta tarde la cercavila volverá a recorrer las calles de la ciudad y posteriormente tendrá lugar la tradicional diada castellera.